DEPORTES
París cautiva al mundo con la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos
Abre los Juegos con una ceremonia original, sobre las aguas del Sena, bajo la lluvia y blindada
Zidane y Rafa Nadal, entre los relevistas para encender el pebetero en una noche mágica para el deporte
La icónica torre Eiffel fue el escenario final de una ceremonia original que discurrió sobre el Sena. - EUROPA PRESS
El pebetero se elevó al cielo de París en un globo al final de la ceremonia. - EUROPA PRESS
Rafa Nadal llevó la antorcha junto a Carl Lewis, Nadia Comaneci y Serena Williams. - EUROPA PRESS
Maria Cadens ayer en el Sena. - EUROPA PRESS
Miquel Travé con Anais Bouchet.- EUROPA PRESS
Con el Sena como escenario y el espectáculo aguado por la lluvia, París 2024 repasó los hitos de la historia de Francia siguiendo a un misterioso encapuchado que portaba la llama, con momentos de protagonismo para la Revolución, la literatura, el cine y un homenaje a mujeres como Simone Veil o Simone de Beauvoir.
El espectáculo de la inauguración de los Juegos Olímpicos, concebido por Thomas Jolly, mágico, original e inédito, al ser el primero en la historia que se desarrolló fuera de un estadio, se dividió en doce segmentos que se fueron sucediendo desde la salida de la delegación de Grecia, desde el puente de Austerlitz, a la cabeza de los 85 barcos que transportaron a las 205 delegaciones olímpicas.
El momento cumbre de toda ceremonia inaugural olímpica, guardado como el mayor secreto de la historia, llegó con el encendido del pebetero. En una secuencia memorable, historia viva del deporte y del olimpismo, Zinedine Zidane, Rafa Nadal, Serena Williams, Nadia Comaneci y Carl Lewis se pasaron la antorcha olímpica camino del pebetero. Zizou apareció en Trocadero, sede del final de fiesta, y entregó el fuego sagrado del olimpismo a Nadal, que avanzó hacia el Sena y tomó allí una barca. En ella le esperaban la tenista estadounidense Serena Williams, la gimnasta rumana Nadia Comaneci y el atleta norteamericano Carl Lewis.
La llama había llegado al Trocadero de la mano de un misterioso personaje encapuchado, al que desde el comienzo de la ceremonia se vio recorriendo París con la antorcha, por canales, calles, tejados y museos, a veces en directo, casi siempre en imágenes grabadas. El recorrido había empezado, también en vídeo, de la mano de Zidane.Rafa Nadal recogió la antorcha en un escenario que le ha hecho leyenda, París, sede del torneo de Roland Garros, donde ha triunfado en 14 ocasiones. Cuando el barco llegó enfrente del Louvre, Amelie Mauresmo, plata olímpica en Atenas 2004, tomó la llama y corrió con ella hacia el museo. Allí se la pasó al exbaloncestista Tony Paker y juntos corrieron por la explanada emblemática en busca de tres deportistas paralímpicos, Nantenin Keita, Alexis Hanquinquant y Marie-Amélie Le Fur. El grupo fue creciendo con nombres notables de la historia del deporte francés hasta que llegó a las manos de La atleta Marie-José Perec y el judoca Teddy Riner, que encendieron el pebetero, un anillo de siete metros, pendiente de un globo aerostático de 30 metros de diámetro situado en los jardines de las Tullerías.
Antes de este espectacular fin de fiesta y mientras los deportistas desfilaban en barco por el Sena, la ceremonia fue un repaso por la historia de Francia y todos los elementos que han hecho destacar al país en todas las facetas culturales. Desde ‘La vie en rose’, Notre-Dame (aún cerrada por la restauración del incendio que sufrió en 2019), con un guiño a la literatura de Victor Hugo y a su popular personaje Quasimodo; ‘Los miserables’, ‘La libertad guiando al pueblo’ y ‘La Gioconda’ –que a pesar de ser el cuadro mejor custodiado del Louvre, llegó a manos de los minions de la saga ‘Despicable Me’– fueron obras artísticas icónicas que tuvieron su protagonismo a medida que el desfile cruzaba la ciudad, con guiños a la moda y entre diferentes actuaciones. La llama la llevó hasta la Torre Eiffel un caballero plateado que hizo todo el recorrido a galope sobre el agua. Ni la lluvia pudo deslucir tanta magia.
Apuntes
- Más de 45.000 policías, 20.000 agentes de seguridad privada y unos 10.000 soldados participaron ayer en el dispositivo de seguridad desplegado en París, con ocasión de la inauguración de los Juegos, lo que trastocó totalmente el transporte y el funcionamiento habitual de la ciudad. “Es sin duda el mayor dispositivo policial que alguien ha podido poner en marcha”, dijo el ministro francés del Interior, Gérald Darmanin.
- Mònica Dòria llevó la bandera de Andorra
- La piragüista del Cadí Canoe Kayak, Mònica Dòria, fue la abanderada de Andorra, junto con el atleta Nahuel Carabana. Son los dos representantes del Principat en los Juegos de París. En la delegación de Estados Unidos, los abanderados fueron LeBron James y la tenista Coco Gauff.
- El presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), Thomas Bach, defendió la alegría del deporte y su poder unificador en el discurso que pronunció en la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos de París, en el Trocadero. “En nuestro mundo olímpico no hay norte global y sur global. Respetamos las mismas reglas, todos importamos”, dijo Bach ante un centenar de jefes de Estado o Gobierno, los deportistas y el público que asistieron a la ceremonia. “Habéis llegado a París como deportistas y ahora ya sois olímpicos”, dijo el dirigente alemán a los atletas.
- La estadounidense Lady Gaga salió de una estación de metro típicamente parisina, construida para la ocasión junto al Sena, para ofrecer la primera actuación musical de la noche. La gran sorpresa quedó para el final, con la reaparición en una de plantas de la Torre Eiffel de Céline Dion, ya retirada por una enfermedad, que cantó el ‘Hymne à l”amour’ de Edith Piaf.