Emma Carrasco no deja de crecer
La joven nadadora leridana Emma Carrasco no deja de crecer tal y como ha demostrado este viernes al lograr la clasificación para las semifinales de los 200 estilos de los Juegos Olímpicos de París.
"He pasado muchos nervios mientras esperaba a que acabasen las dos series que faltaban, pero al final he podido pasar con el puesto doce y clasificarme. Así que muy, muy contenta", ha señalado Carrasco.
Nervios que no se justificaban tras la sobresaliente actuación que la joven ilerdense, de 18 años, ha firmado en su serie, en la que ha llegado a tutear durante la posta de braza a toda una superestrella mundial como la canadiense Summer McIntosh.
Carrasco, que contaba con una desventaja de 1.38 segundos con la canadiense, ganadora de dos medallas de oro y una de plata en estos Juegos de París, se ha situado a tan sólo 49 centésimas de McInstosh tras completar el largo de braza.
"Yo la veía ahí, veía que estaba cerca, pero bueno esa es mi forma de nadar, trato de sacar la máxima distancia en los tres primeros estilos, que son mis fuertes, y luego esperar que me pillen las menos posibles", ha explicado la nadadora de Lleida.
Una táctica de carrera que permitió a Emma Carrasco, bronce los 200 estilos en los Mundiales júnior de Lima 2022, afrontar en tercera posición los últimos 50 metros, en los que ha vuelto a mostrar sus dificultades con el crol.
"Yo sé que es mi punto débil, donde todavía tengo más que mejorar, pero es una cuestión de entrenamientos. Tengo muchos años por delante y es el objetivo a mejorar", ha indicado Carrasco.
Problemas que no impidieron a la de Lleida acercarse a su mejor marca personal y lograr el billete para las semifinales con un tiempo de 2:11.54 minutos, que tratará de mejorar esta tarde.
"Ojalá pudiera bajar en las semifinales del 2:11 y cerrar la temporada de la mejor manera posible. Voy a darlo todo esta tarde", ha señalado Carrasco, que en su debut olímpico ya ha igualado las semifinales que su padre, el también nadador Jordi Carrasco, alcanzó en los Juegos de Sídney 2000, en los fue decimotercero en los 200 estilos.
Ronda de semifinales que no pudo alcanzar el otro representante español en la jornada matinal, el barcelonés Mario Mollá, que cayó eliminado en las series de los 100 mariposa tras concluir vigésimo quinto con un tiempo de 52.27 segundos. Una eliminación de la que Mario Mollá, de 22 años, intentará resarcirse este sábado en las series preliminares del relevo 4x100 estilos.