HOCKEY PATINES LLIGA CATALANA
Sin final para el Vila-sana
El equipo del Pla d'Urgell cae contra pronóstico ante el Cerdanyola después de ir con ventaja de 2-0. Rodero, autocrítico, dice que “soy el primer responsable”
El Vila-sana cayó de forma sorprendente ante el Cerdanyola (3-4) en semifinales de la Lliga Catalana y no estará hoy en la final en la que hubiera optado al primer título en juego. Decepción absoluta para un equipo que es superior a su rival, aunque luego hay que demostrarlo sobre la pista. Más aún cuando el equipo del Pla d’Urgell, pese a hacer un mal partido, se había colocado con un 2-0 a favor.
El Vila-sana volvía a juntar a toda la plantilla en un partido, después de regresar las mundialistas y con apenas tres entrenamientos al completo. Pero todo parecía marchar según lo previsto cuando Dana Antón al inicio de la primera parte y de la segunda colocaba un 2-0 en el marcador. El Cerdanyola, sin embargo, empató poco después con dos tantos en menos de un minuto. E incluso se puso por delante en el marcador (2-3). Victòria Porta restableció la igualada (3-3), pero en los instantes finales el gol del Cerdanyola (3-4) caía como un mazazo y rompía las aspiraciones de un desconocido Vila-sana.Tras el partido, el técnico leridano Lluís Rodero hacía autocrítica. “Soy el primer responsable. Las jugadoras que estén tranquilas, pero hoy no hemos sido nosotras. Nos ha faltado intensidad y ha habido falta de concentración. Estoy tocado porque nos hemos quedado sin jugar la final y también por la manera en que hemos perdido”, comenzaba diciendo un abatido Rodero.“Hemos cometido errores individuales y de precipitación en la segunda parte. Teníamos que saber controlar la presión y no hemos sabido. Los partidos no se ganan hasta el final”, dijo. No obstante, quiso sacar algún aspecto positivo pese a la decepción. “Creo que nos irá bien para la Liga saber que estos partidos deben ganarse. Ahora vendrá la Supercopa y seguro que seremos otro equipo”.
El Pons Lleida cayó derrotado de forma muy honrosa ante el Calafell, en un partido en el que los leridanos tuvieron tres bajas muy importantes como las de Sergi Duch, lesionado en la rodilla derecha; Nico Ojeda, con molestias en el codo y al que el técnico Edu Amat prefirió reservar para el inicio de la OK Liga; y Darío Giménez, con un proceso gripal.
Y pese a estos condicionantes, el equipo leridano dio la cara. Fue capaz de empatar un partido que se le puso primero 2-0 y luego 3-1, con un 3-3 a falta de seis minutos para la conclusión. Pero el Calafell logró a menos de tres minutos el 4-3 que resultaría definitivo. El Pons Lleida solo dispuso de 7 jugadores, dos de ellos porteros.Tras el partido, Edu Amat valoró la respuesta del equipo ante la adversidad. “Veníamos condicionados por las bajas y aún así hemos entendido bien la situación y el equipo ha respondido sin perder la cara. Estamos contentos con el partido que hemos hecho y nos vemos preparados para afrontar el inicio de Liga ante el Vic”.