LOS DETALLES
Exhibición y goleada en Calafell
El Pons Lleida se rehace del empate en el derbi y golea al segundo clasificado en un gran partido. Los listados estuvieron muy sólidos en defensa, con un gran Javi Sánchez, y pudieron sentenciar mucho antes
El Pons Lleida asaltó ayer la pista del Calafell, segundo clasificado de la OK Liga, después de firmar el mejor partido en lo que va de temporada, con una gran solidez defensiva y un ataque eficaz, si bien la sentencia hubiera podido llegar mucho antes. Los listados se rehicieron del empate del domingo en el derbi frente al Alpicat y sumaron tres puntos que les mantiene en la zona de arriba.
Los primeros minutos fueron de tanteo, en los que ambos equipos jugaron con muchas reservas. Las ocasiones, escasas, eran casi todas de disparos lejanos que no inquietaban a ninguno de los dos porteros, a excepción de un lanzamiento de Jordi Badia que repelió el palo. El de La Seu d’Urgell remató sutilmente una perfecta asistencia de Nico Ojeda y la bola se estrelló en la cruceta de la portería. Fue el primer aviso de un Pons Lleida que salió con las ideas muy claras ante un Calafell menos vertical que en otras ocasiones.
La buena defensa y la seguridad de Javi Sánchez mantuvieron a raya a los de Guillem Cabestany, que antes del ecuador del primer tiempo se vieron por debajo en el marcador en una acción personal de Nuno Paiva. El portugués recogió un pase en su área, condujo la bola sin oposición y tras driblar a un rival empalmó desde la derecha y la bola se coló entre el cuerpo de Gerard Camps y el palo. El tanto hacía justicia a las mejores ocasiones del conjunto listado, que dos minutos después pudo haber anotado el segundo en un gran contraataque conducido por Moncusí, que tras zafarse de su defensor asistió a Nico Ojeda, cuyo disparo lo repelió otra vez el palo.
En la otra área, Javi Sánchez estuvo providencial evitando el tanto local en dos grandes intervenciones seguidas, primero a disparo de Olmos y luego de Jepi Selva. Y del posible empate se pasó en cuestión de segundos al 0-2, obra de Jordi Badia. El capitán listado se aprovechó de un rechace de Camps a disparo de Moncusí y fusiló al meta tarraconense para incrementar la cuenta. Al Calafell le tocaba remontar y se volcó ante la meta leridana en busca del gol, que encontró un minuto después, pero los colegiados lo anularon al entender que Olmos había rematado una bola demasiado alta. Los listados aún pudieron dejar el marcador más franco al descanso, pero Fran Torres quiso probar una exquisitez y su disparo por debajo de las piernas lo detuvo Camps.
En la reanudación, el Calafell salió decidido a darle la vuelta al partido, pero su dominio no se tradujo en goles hasta que faltaban once minutos para el final, en una acción de gran clase de Domènech. El tanto pareció revivir los fantasmas del domingo, pero el Pons Lleida se rehízo rápido del golpe y pudo haber sentenciado e, incluso, lograr una goleada aún más escandalosa, pero Camps lo evitó. El meta local protagonizó paradas a bocajarro a disparos de Miguélez, Torres y tres de Paiva, detuvo una directa a Nico Ojeda por la exclusión de Folguera y Darío Giménez se topó con el palo, el tercero de la noche. Finalmente fue Paiva y luego Badia, este en una jugada de crack, los que certificaron una enorme victoria.
Edu Amat, técnico del Pons Lleida, estaba ayer exultante. “El nivel de actitud el equipo ha estado impecable los 50 minutos. Se ha visto el equipo que queremos ver y podemos ser. Ahora tenemos que conseguir que esto sea en cada partido”, comentó. En la previa ya avisó que la defensa iba a ser clave, y lo fue. “Estoy muy contento del paso adelante que hemos demostrado en defensa y ahora tenemos que conseguir que esto no baje”, dijo.
Amat destacó también la buena lectura que hicieron sus jugadores. “Teníamos muy claro la idea de partido que queríamos y el nivel de defensa viene dado por un excelente juego en ataque, con un buen balance y sin que las pérdidas fueran un riesgo. Destacaría la mentalidad de los jugadores de sufrir y de defender y lo hemos llevado muy bien todo el partido”, indicó.
El Pons Lleida se vengó de las dos derrotas sufridas en la pretemporada, una en la Lliga Catalana y otra en un amistoso. “Le teníamos ganas, por eso la motivación ya iba de serie, pero si somos capaces de jugar así en cada partido, entonces sí que seremos peligrosos”, apuntó. Amat también ensalzó la reacción tras el 1-2. “Podían aparecer los fantasmas de que nos podían empatar, pero el equipo se ha mostrado muy sólido y, sobre todo, no ha perdido nunca la cara en ataque, y eso es lo que nos ha mantenido conectados durante todo el partido. La defensa ha sido excelente, pero el trabajo ofensivo casi ha estado al mismo nivel”, dijo.