Historia repetida

El Vila-sana volvió a revivir ayer su particular ‘Groundhog day’, el día de la marmota que protagonizó Bill Murray en la película de 1993. Se enfrentó con el Fraga y el resultado volvió a ser el mismo, una derrota. Fraga y Vila-sana reeditaron ayer la final de la última Champions femenina que se jugó en abril en A Coruña y en la que el equipo oscense se llevó el título continental por penaltis. El referente más reciente fue el partido de Liga del pasado 23 de noviembre, que tuvo el mismo ganador, en este caso por 1-3. Había ganas de revancha en este inicio de la Liga de Campeones y estuvo cerca, pero no se materializó. El Vila-sana se adelantó en el marcador en los primeros compases de la segunda parte, pero el Fraga remontó en el tramo final de un partido intenso como todos los que miden a ambos rivales y del que el equipo del Pla d’Urgell salió enfadado con una actuación arbitral que creen que le perjudicó. En el mismo escenario donde a principio de temporada el equipo ganó la Supercopa, el primer título en sus 20 años de historia, las jugadoras que entrena Lluís Rodero se vieron condenadas por su falta de acierto ante puerta.

El encuentro comenzó con un ritmo frenético y los dos equipos buscando una resolución rápida. Los ataques se sucedían y las dos porteras, Anna Salvat por el Vila-sana y Anna Ferrer, por el Fraga, lo paraban todo. De hecho, ambas firmaron una actuación brillante.

Anna Salvat, por el Vila-sana y Anna Ferrer, por el Fraga, impidieron que el partido tuviera más goles La segunda jornada de esta fase será el 4 de enero y el equipo leridano recibirá al Palau de Plegamans

Las ocasiones más claras, no obstante, fueron para el equipo del Pla d’Urgell. Luchi Agudo puso a prueba a la portera del Fraga en el minuto 5 y Gimena Gómez lo probó en el 6 con el mismo resultado, parada espectacular de Ferrer. En pleno dominio leridano, la jugadora del Fraga Vinyet Flix vio una cartulina azul. Victòria Porta se encargó de ejecutar el lanzamiento directo, pero la meta fragatina desvió la bola, que cayó de nuevo a pies de Victòria, que tampoco pudo marcar en segunda instancia. La mejor ocasión para el Fraga la tuvo Rebeca González en el minuto 9 y Salvat evitó el tanto con una gran intervención.

Tras el brío inicial ambos equipos parecieton tomarse un respiro, aunque seguía siendo el Vila-sana el que tenía el mando, ante un Fraga que se defendía muy bien y que presionaba com mucha efectividad. Dai Silva, en el minuto 13 y Luchi Agudo, en el 22, tuvieron dos buenas oportunidades, pero la primera parte finalizó sin que hubiera goles.

Nada más comenzar la seguda parte los árbitros pitaron un penalti a favor del Fraga que lanzó sin acierto Vinyet Flix (26’). Reaccionó rápido el Vila-sana, que tuvo una gran ocasión con un potente remate de Luchi Agudo (29’). Y un minuto más tarde Anna Ferrer cometió un penalti que además le costó una tarjeta azul y Victòria Porta aprovechó el lanzamiento para marcar el 0-1 (30’).

Dos minutos más tarde María Sanjurjo desaprovechó una falta directa con la que fue castigado el Vila-sana y en el 35 de nuevo los colegiados castigaron al equipo. Esta vez fue con un penalti que falló Rebeca González. El Vila-sana sabía que si no cerraba el partido lo iba a pasar mal. No lo cerró y lo pasó fatal. Tanto, que el Fraga logró darle la vuelta al marcador. Primero fue Adriana Soto la que aprovechó un fallo defensivo de las leridanas para anotar, en el minuto 43, el 1-1.

El ritmo volvía a ser frenético. Victòria Porta pudo marcar en el minuto 44 y, en la acción siguiente, quien tuvo el gol fue Julieta Fernández. Y fue la argentina la que, en el 45, lanzó un potente remate que supuso el 2-1 y una nueva decepción leridana ante el Fraga.

Rodero: “Estoy indignado con el arbitraje, hemos perdido 3 puntos”

El entrenador del Vila-sana, Lluís Rodero, se mostró al final del partido muy descontento con la actuación arbitral, que cree que perjudicó a su equipo. “No nos han respetado los árbitros, ha habido una gran diferencia de criterio por su parte. Ha habido muchas acciones de contacto y han acabado con cinco faltas, les han perdonado alguna tarjeta azul y en la última jugada no se han atrevido a señalar una clara falta a Dai. Estoy indignado por el arbitraje”, explicó.Rodero añadió que “también estoy enfadado porque hemos perdido tres puntos que teníamos encarrilados, nos hemos merecido sin ninguna duda un mejor resultado. Estoy molesto porque teníamos que haber sentenciado el partido y no hemos sabido cerrarlo”, añadió, aunque también reconoció “el gran esfuerzo que ha hecho todo el equipo. Hemos tenido fases de juego muy buenas, pero hemos cometido fallos como el que nos ha costado el primer gol”. Valoró también que “nos vamos con una derrota mínima, hemos perdido una batalla pero la guerra es muy larga”.