¡Enorme victoria del Cadí la Seu!

Cuando menos se esperaba, el Cadí La Seu dio la gran campanada. Pese a la presión de verse ahí abajo, a la ausencia de Yurena Díaz, que no pudo jugar al no estar inscrita cuando se debía haber disputado el partido, con Laia Raventós prácticamente groggy por una gripe y al poderío de Mariam Coulibaly, que rozó el duodécimo MVP de la temporada con sus 29 puntos y 13 rebotes, el conjunto urgelense salió victorioso del Olímpic de Badalona (70-77) después de un enorme partido, sobre todo en defensa secando por completo a la pívot maliense en el último cuarto.

Es el séptimo triunfo del curso y el segundo fuera de casa, donde hacía cuatro meses que no ganaba (desde el 26 de noviembre en la pista del Ensino), lo que le permite salir de las posiciones de descenso y situarse una victoria por encima.

Ya lo había avisado en la víspera Isaac Fernández, si su equipo quería competirle a un Joventut al alza –acumulaba 5 triunfos, la mejor racha actual de la Liga– y a la MVP de la competición, Mariam Coulibaly, debía salir a morder desde el inicio, y así lo hicieron sus jugadoras. Tras un duelo inicial entre la referente verdinegra, autora de 4 puntos seguidos, y de Seehia Ridard, que firmó 5, la Penya tomó la delantera aprovechando su gran acierto exterior, incluido un triple de la propia Coulibaly (13-9). Pero el Cadí reaccionó, subió una pizca su intensidad defensiva y en ataque fue más certero, todo ello para endosarle un parcial de 0-9 a las verdinegras y darle la vuelta al luminoso (13-18, m.7).

Fue el momento en que Fernández decidió poner en pista a Naignouma Coulibaly para defender a su hermana pequeña, un duelo del que Mariam salió victoriosa anotando un triple a tablero muy afortunado que, junto a cuatro puntos seguidos de Santibáñez, dos de ellos por una absurda antideportiva de Mandic, ayudaron a que la Penya devolviera el golpe con un parcial de 7-0 (20-18). Las leridanas aguantaron el tipo y acabaron el primer periodo cuatro puntos arriba (20-24).

En el segundo asalto, el técnico local situó a sus dos torres en pista, Coulibaly y la ex del Cadí Geldof, y su dominio en la pintura se acrecentó, aunque la Penya, que movía muy bien el balón, no lograba sacar rendimiento al bajar bastante su porcentaje de acierto (25-25, m.15). La irrupción otra vez de la maliense hizo que el Joventut volviera a ponerse por delante ante un Cadí que sufría mucho en ataque (33-27). Fernández tuvo que parar el partido y su equipo logró parar la sangría con un parcial de 0-6 que le permitió llegar al descanso con las espadas en todo lo alto (33-33), pese a las cifras de Coulibaly, que ya firmaba dobles figuras (16 puntos y 10 rebotes).

En la reanudación apareció una Júlia Soler desatada. La capitana, que venía de un primer tiempo para olvidar en ataque, encadenó tres triples seguidos en apenas cuatro minutos que, unido a otro de Regina Aguilar, situó al Cadí con una máxima renta de siete puntos (42-49, m.25). La Penya, otra vez liderada por Coulibaly, volvió a igualar el duelo con un parcial de 11-4, si bien un 2+1 de Mandic dejó un esperanzador 53-56 al final del periodo. La cuarta falta de Murekatete al poco de iniciarse el último asalto mermó mucho el juego interior de las urgelenses, pero la joven Mata suplió a la ruandesa a base de garra y acierto y junto a los triples de Ridard y Soler, el Cadí no solo logró mantener la ventaja, sino que la incrementó hasta una máxima de diez, 61-71, con técnica incluida al entrenador local.

Faltaban poco más de dos minutos y las leridanas, que secaron por completo a Coulibaly con una defensa asfixiante, aguantaron la presión y gracias a los rebotes de Anna Palma (10), que volvía a jugar pese a los dolores que sufre en un pie, y a los tiros libres de Regina Aguilar (4 de 4) acabaron certificando una victoria que vale un cuarto de la permanencia.