Mercolleida prevé cerrar el año con unos beneficios de 45.000 euros

El Consejo de administración de Mercolleida prevé cerrar el año con unos beneficios de 45.000 euros, según explicó su presidente y alcalde de Lleida, Àngel Ros. Además, para el año que viene se han previsto unos ingresos de 720.000 euros y unos gastos de 675.000 euros, con lo que al cierre de 2017 se podrían conseguir otros 45.000 euros de beneficios.

El consejo de administración tiene previsto que en el presupuesto del próximo año se contemple unas inversiones por valor de unos 60.000 euros para la modernización de la red informática y de tecnología de la información de Mercolleida.

Ros recalcó el correcto funcionamiento de la Lonja de Mercolleida en los diferentes mercados agrícolas y ganaderos, especialmente en el porcino, de referencia para más del 90% de las operaciones realizadas en el Estado.

Por su parte, el consejero delegado de Mercolleida, Francesc Ollé, informó que se está avanzando en la mejora de la gestión del sector vacuno. Además, recalcó el buen funcionamiento de l mercado cunícola (Moncun) gracias al acuerdo de colaboración con la Llonja de Bellpuig.

La crisis de los huevos se une a la de la carne de pollo blanco que está sin cotización en la lonja de Bellpuig.

En otro orden de cosas, la Comisión Europea ha pedido a los Estados miembros que tomen medidas para asegurar una mayor vigilancia e “intensifiquen la bioseguridad” en las explotaciones avícolas, tras registrarse varios brotes de gripe aviar en Hungría.

UP denuncia los bajos precios de los huevosUnió de Pagesos advirtió ayer que el precio pagado al productor por una docena de huevos de tamaño medio durante las primeras 40 semanas de este año ha sido de 0,55 euros, mientras el precio del 2006 fue de 0,57 euros, según el ministerio de Agricultura. En cuanto al precio que paga el consumidor, este año es de 1,37 euros la docena, mientras que en 2006 era de 1,20 euros. UP recordó que este sector sufrió una fuerte reestructuración en 2012 para adecuarse a la normativa de bienestar animal marcada por la UE, que supuso grandes inversiones económicas para los productores y una pérdida progresiva de gallinas ponedoras.