Prefabricats Pujol surte la nueva plataforma de Amazon en Barcelona

El nuevo centro logístico de Amazon en Barcelona, en el que la compañía prevé una inversión de 200 millones de euros, tendrá acento leridano de la mano de Prefabricats Pujol. La empresa prefabricadora de Mollerussa suministra la mitad de los 200.000 metros cuadrados de forjados que necesita la obra. Así lo explicó a SEGRE el consejero delegado de la compañía, Jordi Pujol. Se trata de pilares jacenes y placas alveolares en la que representa la obra más grande de prefabricados en el Estado español. El montaje comenzó hace un mes y finalizará a finales de enero.

“Amazon nos conoce y de hecho hicimos la ampliación de las instalaciones de Amazon en Madrid. La compañía quería la misma tipología de edificio para Barcelona y ha vuelto a contar con nosotros”, explicó Pujol. La obra cuenta con un plazo de producción de solo tres meses y no existe en España ninguna compañía con la capacidad de contar con todo el material necesario, los 200.000 metros cuadrados citados, en un período de tiempo tan corto. Así que Prefabricats Pujol suministra la mitad y otra empresa catalana, Precon, del grupo de Ciments Molins, aporta el otro 50 por ciento.

El Grupo de Mollerussa ya había trabajado en la ampliación de Amazon en Madrid

Jordi Pujol, que no quiso desvelar el importe de esta operación, apuntó que este año el Grup Pujol prevé finalizar el ejercicio con unos cien millones de euros de facturación. Supondrá el tercer ejercicio con mejora del volumen de negocio después de la recesión sufrida en el sector de la construcción. Con todo, aún no ha recuperado las cifras precrisis. El año pasado la facturación del Grupo, que cuenta con una plantilla de seiscientos trabajadores, se situó en los 95 millones de euros.

En cuanto a la situación general del sector, Pujol apuntó que la obra pública se encuentra parada, primero por la falta de gobierno y después, por la falta de dinero para acometer proyectos. Es una situación que poco afecta a Prefabricats Pujol, teniendo en cuenta que incluso en los mejores momentos de inversión pública, la obra pública apenas representaba un 10% de su facturación. La obra privada se encuentra en mejor situación, afirmó. Habla de ampliación de fábricas o edificios, por ejemplo, con niveles de actividad superiores a los de 2015, y los del año pasado fueron mejores que los del 2014. Pese a esta mejora, afirmó que la construcción aún se encuentra en crisis, a pesar de que se aprecian signos de recuperación día a día. Sin embargo, lamenta que no se pueden hacer previsiones de futuro.