Las bajas laborales en Lleida, en su nivel más alto desde el año 2011

La incidencia de las bajas de trabajadores en Lleida por enfermedad se ha disparado en la provincia en los últimos años y en la actualidad se encuentra en su tasa más alta desde el año 2011 con más de 3.000 al mes. Durante los años más duros de la crisis económica, el miedo a poder perder el trabajo había reducido de forma espectacular el número de personas que se acogían a las bajas y eran muchos los trabajadores que llegaban a rechazarlas y preferían acudir a sus empresas. Ahora, con la mejora de la situación económica explica el repunte en las bajas, pero no es algo exclusivo de Lleida. Así lo demuestra un informe hecho público por la mutua Asepeyo, que afirma que el absentismo laboral se ha disparado incluso a niveles precisis. En Lleida, el aumento no es tan espectacular, pero sí que se aprecia un repunte hasta el año 2011.

En concreto, los datos de la Seguridad Social apuntan que la tasa de bajas se sitúa en 20,92 por cada mil trabajadores. Es decir, que se sitúa en algo más de dos de cada cien. En 2013, la tasa era de apenas 17,67 trabajadores por cada mil, mientras que en 2011 se alcanzaba los 21,49. En cuanto a la duración media de las bajas, las cifras se han ido incrementando también en los últimos años. Si en los años 2011 y 2012 la duración media era de algo más de 35 días, en la actualidad se cifra en 37,48, según la estadística oficial de la Seguridad Social. Según Asepeyo, el absentismo laboral conlleva un coste directo de unos 8.000 millones de euros a las empresas españolas. Teniendo en cuenta el peso de Lleida en el mapa laboral estatal, en el caso de la provincia rondaría los 80 millones. Según el subdirector general de Asepeyo, el incremento de las bajas genera un déficit entre los gastos y los ingresos procedentes de las cuotas para cubrir estas eventualidades, una situación inédita en la historia de esta mutua y extrapolable al resto del sector. Esta evolución al alza del absentismo se da con más fuerza en el régimen general, aunque también ha crecido en el de autónomos, si bien este colectivo aún recauda más de lo que se gasta en contingencias comunes. Según sus datos, los 8.000 millones de euros de costes directos, de los que unos 80 serían en la provincia de Lleida, provienen de las prestaciones de la Seguridad Social que cobra el trabajador de baja laboral por contingencias comunes y del complemento salarial que abona la empresa, en el caso de que así lo contemple su convenio colectivo.