CEREAL BALANCE
Los productores de cereal cierran la cosecha de maíz en ‘números rojos’
El incremento de las cotizaciones es aún insuficiente para superar los costes de producción || Sin embargo, esperan rendimientos altos de 16.000 kilos/hectárea
El ligero aumento de las cotizaciones de los diferentes cereales en los mercados siguen sin cubrir los costes de producción para los agricultores leridanos que además se están viendo penalizados por la imposibilidad de terminar de cosechar en muchos campos de maíz por los problemas que han provocado las últimas lluvias sobre la provincia.
Según Santi Caudevila, responsable de cereales de Unió de Pagesos (UP), tanto las últimas lluvias en la provincia como la aparición de frecuentes bancos de niebla están imposibilitando terminar de cerrar la campaña de maíz de invierno al estar la tierra demasiado blanda para que pueda entrar en las fincas la maquinaria pesada para poder trabajarla.
El girasol, el centeno, cebada y la colza en menor medida, destacan como cultivos alternativos
En cuanto a calidad del cereral no se esperan cambios y se prevé que sea alta y en cuanto a las previsiones de rendimiento, estas tampoco han variado en los últimos meses, con unas expectativas de alcanzar entre los 15.000 o 16.000 kilos por hectárea, unas magnitudes que sin ser
excepcionales
no son del todo malas.
Sin embargo, según Caudevila los precios siguen muy por debajo de los costes de producción. Así, explicó mientras la última cotización de la lonja de Barcelona está marcando para el maíz en torno a los 183 euros por tonelada, los costes de producción rondan los 200 euros por tonelada y las cotizaciones de otros cereales como el trigo panificable están llevando rumbos similares.
Además, las previsiones de grandes cosechas de los grandes países productores internacionales como Estados Unidos, Argentina, Ucrania o Brasil, tampoco ayudan a que los precios de los cereales puedan a subir más.
El responsable de Unió de Pagesos manifestó que con estos bajos precios, la caída de la renta del agricultor es notable y apenas lograr sobrevivir.
“Actualmente, solo el bajo coste del dinero y las lineas de crédito de las entidades financieras están dando un cierto respiro al payés”, explicó Caudevila.
Por otra parte, en cuanto a cultivos alternativos se está notando cierto interés por el girasol, que aunque es un cultivo más barato de producir, sus rendimientos son menores. También entre las preferencias de los cerealistas leridanos se encuentran las producciones de centeno, la cebada o la colza pero esta última en menor medida, según el responsable de cereales de UP.