Salarios y pensiones pierden poder de compra en Lleida al subir el IPC

Los precios se incrementaron en diciembre siete décimas en relación con noviembre y dejaron una inflación al cerrar el año en el 1,9% en Lleida. El indicador confirma que trabajadores y pensionistas entran en 2017 con menor poder adquisitivo, ya que los salarios ligados a convenios suben sobre el 1,14% y las prestaciones de los pensionistas un 0,25%.

Lleida encadena así cuatro meses seguidos con la inflación en positivo. En términos mensuales, los precios en Lleida subieron siete décimas, como consecuencia del encarecimiento de los carburantes (1,7%) frente a la bajada del año anterior y la vivienda. En este caso, por el aumento de la factura eléctrica que acumula ocho meses de subidas (1,6%), debida un mayor encarecimiento de la electricidad que el año anterior, así como por la subida de precios del gasóleo para calefacción y del gas, que disminuyeron en 2015. El ocio y la cultura también tiraron de los precios, al aumentar hasta el 3,2%, por el alza de costes de los viajes organizados.

Catalunya es la comunidad donde más sube la inflación, el 1,9%, y en España se queda en el 1,6%

Las patronales abogan por seguir con la moderación salarial “para consolidar la recuperación”

La cesta de alimentos y bebidas no alcohólicas aumentaron sus precios el 0,5% por el encarecimiento de legumbres y hortalizas frescas.

Los descensos más destacados, por contra, los protagonizaron los vestido y el calzado, que bajaron sus pecios un 1,8%, ya que muchos comercios adelantaron la temporada de rebajas.

El IPC en Catalunya subió ocho décimas en diciembre respecto a noviembre mientras que la tasa interanual se situó en el 1,9,%.

En el conjunto de España, la inflación subió un 0,6% en diciembre respecto al mes anterior y elevó nueve décimas su tasa interanual, hasta el 1,6%, cuarta tasa positiva consecutiva y su nivel más alto desde junio de 2013 (1,8%).

El ministerio de Economía defendió que ni salarios ni pensiones perdieron poder adquisitivo en 2016 pese al repunte de la inflación, ya que la tasa media anual, afirma, arroja un descenso del 0,2% y ciñó el aumento de precios a “los tres o cuatro últimos meses” del año.

Este incremento de precios contrasta con la estimación del ministerio de Energía de una caída del 11% en la factura para el consumidor medio en el pasado ejercicio. En concreto, en el pasado mes de diciembre, el consumidor medio pagó 71,58 euros por el recibo de la luz, frente a los 68,68 euros de noviembre.

Este incremento de los precios se está debiendo, según Energía, a una combinación de factores climáticos y de suministro energético.

CCOO, por su parte, reclamó también incrementos salariales en los convenios colectivos para que los trabajadores también noten los efectos de la recuperación económica, así como un aumento progresivo del salario mínimo interprofesional (SMI). Ambos sindicatos también reclamaron la derogación de la reforma laboral y el control de los precios de los servicios básicos y de las redes de distribución.