Trabajo endurece los controles sobre jornada laboral y vacaciones

La Inspección de Trabajo ha endurecido los controles sobre las jornadas laborales y las vacaciones que tienen los empleados en las empresas. Se trata de una vía con la que pretende luchar contra posibles irregularidades en la contratación pero que incrementa la burocracia a la que tienen que hacer frente las compañías. La campaña comenzó el año pasado y ahora se puede considerar generalizada.

Uno de los objetivos es comprobar que las personas que tienen pactada con su empresa una jornada parcial se ajuste en realidad a esta modalidad. Es decir, que el tiempo efectivo de empleo coincide con el número de horas pactadas. Se trata de un tipo de contrato que ha proliferado en especial con la crisis económica y que muchos trabajadores se ven forzados a aceptar al no encontrar empleos que garanticen la jornada completa. Pero este tipo de acuerdos laborales se encuentra también rodeado de polémica, ya que los sindicatos advierten que en muchos casos se superan de largo los horarios pactados sin cobrarlo o haciéndolo “en negro”. Aunque se dan en todos los sectores económicos, están más presentes en algunos, como puede ser el de la hostelería, por poner solo un ejemplo.

La campaña de Inspección de Trabajo se inició en 2016 y ahora se puede considerar generalizada

Con la crisis, también se han reducido las horas extraordinarias en la mayoría de las empresas, por no decir en todas. Con la recuperación de la marcha de la economía, Inspección quiere asegurarse que no se están haciendo de nuevo alargamientos de jornada sin cotizar por esas horas de más. Además, tiene en su punto de mira las vacaciones de los trabajadores.

Para hacer efectivo el control y dependiendo de las empresas, cada compañía cuenta con diferentes fórmulas, como sistemas para fichar a la entrada y salida del puesto de trabajo. Además, deberá informar a Inspección de la situación de cada uno de los miembros de su plantilla e incluso de las vacaciones. En la práctica supone un incremento del “papeleo” o la burocracia a la que deben hacer frente equipos de recursos humanos de las compañías de mayor tamaño o los propios empresarios en el caso de las pequeñas empresas, las que más proliferan en el caso de las comarcas de Lleida.

Según lo establecido el artículo 35.5 del Estatuto de los Trabajadores: “A efectos del cómputo de horas extraordinarias, la jornada de cada trabajador se registrará día a día y se totalizará en el periodo fijado para el abono de las retribuciones”. Dicho artículo, según la CEOE, está siendo interpretado como obligatorio para todos los trabajadores por parte de la Inspección, tanto si hacen horas extras como si no, para comprobar que no se superan las 40 horas semanales o registrar las horas extras trabajadas. Todo ello en virtud de una sentencia de la Audiencia Nacional que establece que se ha de registrar la jornada, incluso a tiempo completo.

La patronal CEOE advierte que se incrementan las sancionesLa patronal CEOE advierte que se han intensificado las inspecciones de Trabajo orientadas al cumplimiento del horario laboral, lo que está ocasionando un incremento de las sanciones a empresas que no disponen de un registro horario de entradas y salidas de sus trabajadores.