Los payeses cobran los peores precios del cereal al menos desde 2010, según el Govern

La conselleria de Agricultura acaba de hacer público el análisis de Preus percebuts pel pagès de 2016 y el balance es claramente negativo para buena parte de los grandes sectores leridanos. Por poner un ejemplo, los cerealistas cobraron el año pasado sus cosechas a los precios más bajos al menos desde 2010 y en el caso de la fruta dulce, aunque se aprecian repuntes frente a 2010, si la comparación se hace con tres años atrás, la caída en las remuneraciones oscila entre un 15,6 y un 30,3%.

Los cerealistas llevan tiempo denunciando que sus ingresos se están viendo mermados, especialmente si tenemos en cuenta que el año pasado las cosechas fueron cortas debido a los efectos de la sequía, lo que ya auguraba pérdidas millonarias. Si a los pocos kilos en los almacenes se suma la caída de las cotizaciones, el cóctel para sus cuentas de resultados es explosivo. Por poner solo unos ejemplos, la conselleria cifra en apenas 15,55 euros por cada cien kilos lo que ha cobrado un agricultor por un kilo de trigo, mientras que si hablamos de cebada de seis carreras se limita a 15,57 y si es de dos carreras, serían 15,47. Para hacerse una idea de qué estamos hablando de bajos ingresos, en 2012 conseguían por esas mismas producciones 20,45 euros, 23,63 euros y 24,01 euros, respectivamente.

Los productores de alfalfa fueron víctimas de un mercado que no acabó de demandar como se creía

Vacuno y porcino registran los mejores resultados y conejo y pollo, a la baja

Los productores de alfalfa también fueron víctimas de un mercado que no acabó de demandar como se esperaba. Se vieron afectados por la crisis del sector lácteo, uno de sus clientes, y por un mercado chino que estuvo más retraido de lo que hubiera sido deseable. El año pasado, la conselleria calcula que los precios percibidos por los payeses se limitaron a 13,88 euros por cada cien kilos, frente a los 15,51 de 2015 o los 17,17 que calcula el departamento de Meritxell Serret que se llegaron a embolsar en 2012.

En el caso de la fruta dulce, la Generalitat apunta a mejoras de precios en 2016 frente a un 2015 que volvió a ser especialmente duro por los efectos del veto ruso. Eso sí, los incrementos fueron mínimos y los ingresos llegan a ser entre un 13,6% inferior a los de 2013 en el caso de la pera y de un 30,3% en el del melocotón. Queda claro que el veto ruso sigue haciendo estragos y continúa en esta campaña, con unas cotizaciones mínimas en la manzana.

Entre los pocos sectores agrícolas con precios en niveles aceptables se encuentra el vino con Denominación de Origen, en su mejor nivel al menos desde 2010, y el aceite de oliva, aunque con poca producción.

En el caso del vacuno de carne, por su parte, la conselleria de Agricultura apunta a una mejora, aunque muy discreta, de los ingresos por kilo, con un promedio anual de 2,04 euros por kilo.

Pese a todo, el sector del conejo no solo sigue atravesando dificultades en el capítulo de ingresos por kilo, sino que se van agravando. Los ingresos por kilo de conejo, según Agricultura, se limitaron el año pasado a 1,63 euros, euro y medio menos que en 2015. Pero hay que tener en cuenta que la conselleria calcula que en 2013 el mismo producto se valoraba a 1,96 euros.

En el caso del precio del pollo las caídas no son quizás tan espectaculares pero sí preocupantes para los granjeros. El año pasado ingresaron apenas un euro por kilo, cuando en 2012 habían conseguido 1,15. Es decir, que los ingresos del año pasado eran un 15% inferiores.

La ganadería aguanta mejor un año díficil en el campoEl informe de Preus Percebuts pel pagès de la conselleria de Agricultura apunta a que la ganadería, al menos el vacuno y el porcino, aguantó mejor un 2016 difícil en el capítulo de precios. El estudio apunta a que los ganaderos dedicados al sector del cerdo ingresaron prácticamente lo mismo el año anterior por kilo de animal vivo, con 1,13 euros por kilo.