ENTREVISTA SINDICATOS
«Subir los salarios es una obligación hoy en día en Lleida»
Cristina Rodríguez acaba de tomar el relevo de Jaume Sellés en la secretaría general de CCOO de Lleida con muchos retos, pero el más importante es el que los trabajadores puedan recuperar derechos perdidos durante la crisis. Alerta que es posible que la situación desemboque en una huelga general ante las políticas del Gobierno de Mariano Rajoy en diferentes aspectos, como las pensiones. Considera que la recuperación económica debe llegar a todos y, por ello, “subir salarios es una obligación hoy en día en Lleida”.
¿Cómo ha accedido al reto de estar al frente de CCOO de Lleida?
Comencé a trabajar en el sindicato en 2007, en la permanente de Educación, compaginándolo con mi trabajo de profesora de educación física. Al cabo de tres años me volqué al cien por cien en CCOO y ahora llevaba cuatro años como secretaria general en Educación. Mi compromiso era continuar cuatro años más, pero diferentes personas me animaron a pensar en presentarme a la secretaría general. Yo creía que podía haber otros posibles candidatos, pero nadie dio el paso y, tras valorarlo mucho, me decidí a darlo yo con la colaboración de Carles Asensio (nuevo secretario de Organización) y otros compañeros.
Es la primera mujer secretaria general del sindicato. ¿Ha pesado?
El sindicato celebró la Assemblea Sindical Oberta con una apuesta por feminizar el sindicato y creo que todo ha influido un poco, también la juventud.
El sindicato afronta un cambio de organización. ¿Por qué?
Las federaciones de educación, sanidad y función pública dan paso al área de servicios públicos. Las de agroalimentación e industria se unen en el área de Industria, mientras que las de servicios privados, construcción y servicios conforman el área de servicios. Solo se da en Lleida este cambio, que puede ser una prueba piloto de cara a una futura expansión territorial. Tenemos cuatro años para demostrar que esta organización será un éxito. Permitirá reducir costes, esfuerzos personales y tiempo y establecer sinergias. Es un reto, como lo es también acercar el sindicato a los jóvenes.
¿Cómo pretende conseguirlo?
Por ejemplo, yendo a los centros donde se imparten ciclos formativos o la UdL y explicarles qué es un sindicato, para qué sirve, de dónde venimos... Acercar el sindicato a los jóvenes es una de mis obsesiones.
Su antecesor, Jaume Sellés, explicaba que la crisis se ha notado en un descenso de afiliados. ¿Qué harán para superarlo?
Ha habido un descenso en general en todos los sindicatos y no somos una excepción. Nuestro objetivo no solo es mantener la afiliación actual, sino acercarnos a los jóvenes, y que aquellos que se jubilan no se alejen de CCOO. Queremos recuperar a quienes por la crisis se dieron de baja y estamos haciendo estrategias muy importantes, como la cuota cero para parados o muy reducidas para jóvenes.
¿Es verdad que la crisis ha desmovilizado a los trabajadores?
Tenemos un problema muy grave. En los últimos años, movilizar a los trabajadores parece misión imposible. Debemos hacer pedagogía en centros de trabajo, con secciones sindicales fuertes. Es verdad que existe el problema de que más del 90% son pequeñas y medianas empresas y organizar a los trabajadores resulta complejo. Necesitamos plantar cara a aspectos como la precariedad laboral, la subcontratación y que haya personas en una empresa que hagan la misma función que otra y cobre la mitad, por ejemplo. Sin la fuerza de los trabajadores, los sindicatos no somos nadie y por ello necesitamos movilizarnos.
¿Cuáles son los problemas más graves en el mundo laboral hoy?
La precariedad laboral. Está a punto de convocarse una huelga en el sector de mataderos de aves y conejos y tenemos problemas en empresas como Milsa, que abusan de subcontratación con las falsas cooperativas, por poner unos ejemplos. Además, me indigna la brecha salarial entre hombres y mujeres. Lleida no es diferente a otros territorios, aunque tienen sus propias especificidades, como la campaña de la fruta.
¿Que relación hay entre sindicato y patronales?
Nuestro caballo de batalla es negociar mejoras y convenios. No es generalizado, pero no puede ser que un empresario incremente beneficios un 200% y apueste por invertir en bolsa en lugar de incrementar salarios.
Los datos macroeconómicos demuestran una mejora de la situación pero, ¿llega al trabajador?
Hace tiempo que debería haber llegado. Incrementar salarios y que estos sean dignos es clave para revitalizar la economía, porque la gente puede consumir más, los bancos dar más créditos... Subir salarios, en la situación actual, es una obligación hoy en día en Lleida.
¿Cree posible una convocatoria de huelga general por aspectos como las pensiones?
Se deben revalorizar con el IPC y que la solución del sistema no pase por trabajar hasta los 70 años, sino por generar empleo de calidad. Sí puede haber una huelga general porque las pensiones están en juego. Estamos en un momento crítico, con un Gobierno central sin mayoría absoluta, y lucharemos, si hace falta, con una huelga general.