EMPRESAS AGROALIMENTARIAS
Sada invierte dos millones en mejoras en su matadero de Lleida
Fundamentalmente en muelles de carga y en el eviscerado automático de aves|| La empresa da empleo en esta planta a más de trescientos trabajadores
La empresa Sada, propiedad de la multinacional Nutreco, apuesta por su matadero de aves de la ciudad de Lleida, en el que completa una inversión de dos millones de euros. En concreto, las inversiones se centran en los muelles de carga, que ha hecho nuevos por completo, y en la modernización del sistema de evisceración de los pollos, que ha pasado de ser manual a automático gracias a una nueva maquinaria. Este últimos proceso de modernización ha supuesto la reubicación en otras labores dentro del matadero de doce trabajadores, seis por turno. Con la nueva maquinaria, el proceso se puede llevar a cabo por dos empleados en cada uno de los dos turnos de trabajo, de mañana y de tarde. El proceso de inversiones y mejoras comenzaron a finales del pasado año y supone una apuesta por la calidad y la máxime higiene.
Con todo, el matadero de Lleida, que Nutreco primero alquiló y después adquirió a Copaga, da empleo en estos momentos a un total de 306 trabajadores, según explicaron fuentes de la plantilla.
Estas inversiones en la planta ubicada en el polígono industrial El Segre demuestra la apuesta de la compañía por Lleida, después del cierre del matadero que tenía en Valladolid. En ese caso, se atribuyó esta decisión al hecho de que el matadero se encontraba ubicado en el centro de la ciudad, lo que impedía posibles crecimientos de la planta. Este matadero, según fuentes de la plantilla, sacrificaba diariamente del orden de 40.000 pollos, mientras que el de Lleida alcanza en la actualidad los 60.0000.
Sada era el proveedor de carne de pollo de Mercadona, empresa de distribución que ha ido abandonando paulatinamente las relaciones comerciales con la compañía en favor de un nuevo interproveedor. En marzo de 2014, el presidente de Mercadona, Juan Roig anunciaba que en tres años iban a “desengancharse” de Sada.
El hecho de que el matadero de Lleida se encuentra situado estratégicamente ha jugado a favor de la planta, dado que ha podido exportar en busca de nuevos mercados para compensar la desaparición de un cliente tan importante como el gigante del sector de la distribución de capital valenciano, según las fuentes de la plantilla.