BANCA ANÁLISIS
Más de 37.000 leridanos carecen de oficina bancaria en su municipio
Un total de 127 pueblos de la provincia no disponen de sucursal, el 55% del total|| El 8,6% de la población debe trasladarse para ir al banco, la mayor tasa catalana
Imagen de archivo de una persona sacando dinero de un cajero automático.
La desaparición de cajas de ahorro y las fusiones de entidades financieras ha supuesto en el cierre de sucursales. Este cambio del mapa financiero se traduce en que 127 de los 231 municipios de Lleida carezcan en la actualidad de sucursales de entidades financieras. Así lo pone de manifiesto el estudio “El futuro del sector bancario
español tras la reestructuración” que acaba de publicar Cajamar. En total, el 55 por ciento de los municipios de la provincia carece de una oficina bancaria, una tasa que en Catalunya solo supera la provincia de Girona (57%). Así las cosas, 37.458 leridanos tienen que trasladarse a una población vecina si quieren hacer alguna operación financiera de forma presencial, es decir, el 8,6% de la población de la provincia, a tenor del informe coordinado por Joaquín Maudos. En este caso, el porcentaje de población sin bancos es la más alta de Catalunya, seguida muy de cerca por Girona (8,3%), lejos de Tarragona (7%) y a años luz de Barcelona, donde apenas un 1,3% de sus ciudadanos tienen que buscar una sucursal en otro municipio.
Desde 2008, son 9 los municipios de Lleida que se han unido al grupo de poblaciones sin banco
Esta situación se explica porque son las poblaciones pequeñas, que abundan en las comarcas de Lleida, las que han quedado fuera del mapa financiero con la fuerte reestructuración que ha sufrido el sector y que, según todos los expertos, aún no ha acabado. Se auguran nuevos movimientos en el sistema, en especial con las miras puestas ahora en cuál será el futuro del Banco Popular.
Pese a las elevadas tasas registradas en Lleida de población y municipios sin sucursales, hay otras provincias españolas en las que buscar un banco resulta aún más difícil. Por ejemplo, en Palencia no hay ni una oficina en el 83,2% de los municipios mientras que el 22,5% de la población de Segovia tiene que trasladarse si quiere hacer una operación en ventanilla.
Todos estos datos se refieren a 2015, los últimos que recoge el informe, que hace una comparación con 2008, el primer año de la crisis que dio paso a la reestructuración del sector financiero. En ese período han sido 9 los municipios de Lleida que han perdido el banco que tenían, unas poblaciones que cuentan con 2.304 vecinos.
El hecho de que desaparezcan oficinas coincide con un incremento de la actividad online de la banca, pero aún es bajo el porcentaje de ciudadanos que apuesta por este tipo de contacto en exclusiva con su entidad, y que no utilizan las personas de mayor edad.
