Avisan de una huelga general en Correos si se mantiene el recorte de la financiación pública

En pleno trámite parlamentario de los presupuestos generales del Estado, CCOO, UGT, CSI·F y Sindicato Libre han anunciado que no descarta la convocatoria de huelga general en la mayor empresa pública del país si no se rectifica el recorte de más de un tercio de la financiación pública.

Los sindicatos afirman que han tenido acceso a una información en el trámite parlamentario según la cual al recorte de un tercio de la financiación prevista por el Ministerio de Fomento se suma un nuevo mordisco a la partida presupuestaria de la prestación del servicio postal universal, de medio millón de euros. Cuantía que el mismo Ministerio ha decidido trasvasar a "Infraestructuras del transporte ferroviario".

Para los representantes de los trabajadores es "intolerable y una barbaridad la sangría presupuestaria que están haciendo en Correos, cuya única explicación es poner fin a la empresa pública de una manera lenta y agonizante".

Los sindicatos han iniciado una ronda de contactos y reuniones con los representantes políticos con el objetivo de poner en marcha una serie de iniciativas orientadas a rescatar la financiación del servicio postal universal, recorte en el proyecto de presupuestos generales del Estado que actualmente se está debatiendo en el Parlamento y que para los sindicatos ya estaba muy por debajo de lo que requiere la prestación pública encomendada en Correos, cuyo carácter deficitario tienen que cubrir los PGE.

La secretaria de CCOO Correos en la provincia de Lleida, Ana Isabel Clua Vázquez, ha subrayado que "el recorte afectará en primer lugar a los ciudadanos, que verán reducido de forma notable su derecho a recibir y enviar cartas, paquetes y envíos postales, la reducción de la plantilla en más de un tercio, así como los 57.000 trabajadores que verán precarizado el trabajo y sus condiciones de trabajo”. La secretaria provincia ha aseverado que este tijeretazo lastrará la cuenta de resultados de Correos y, con eso, se perderá en regularidad y en extensión en todos los núcleos de población de los 8.000 municipios: se dejará de recibir el correo cinco días a la semana, y será el mismo ciudadano el que se tendrá que desplazar para ir a recoger su correspondencia-paquete, porque el cartero ya no llegará a su domicilio, además de tener que recorrer varios kilómetros hasta su oficina más próxima, ya que se cerrarán miles, según el sindicato.