BANCA EMPLEO
La compra del Popular pone en juego miles de empleos
La compra del Banco Popular por parte del Banco Santander al precio simbólico de un euro pone fin a las dudas de los clientes de la primera entidad, que en las últimas semanas habían retirado de forma masiva fondos del grupo. Sin embargo, abre serios interrogantes sobre el futuro de miles de empleados, que en el caso de la provincia de Lleida se estima en unos 75 empleados repartidos en una treintena de oficinas. El Banco Santander, aunque se ha hecho con el Banco Popular por un solo euro, debe asumir toda su deuda, aunque tiene solvencia suficiente para aportar la liquidez inmediata que la entidad demandaba y la capacidad de llevar a cabo una multimillonaria ampliación de capital con la que sanear el maltrecho balance del banco intervenido.
Por otra parte, algunos expertos calculan que las demandas de los clientes podrían superar los 1.500 millones de euros. La intervención del banco supuso la amortización de las acciones, lo que significó poner a cero su valor, así como lo emitido en bonos contingentes convertibles (denominados cocos en argot financiero) y en deuda subordinada.