FINANZAS
CaixaBank dice que el traslado de su sede social a Valencia es definitivo
Gana la cifra récord de 1.488 millones, 53,4% más, al integrar BPI
El consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar, ha asegurado que la decisión del consejo de administración de trasladar la sede social del banco de Barcelona a Valencia por la crisis política en Catalunya es definitiva. "Si el consejo hubiese querido decir que el traslado era temporal lo hubiera dicho, y no dijo nada al respecto", ha declarado Gortázar durante la rueda de prensa de presentación de los resultados del tercer trimestre, que por primera vez se celebra en Valencia.
El ejecutivo ha subrayado que la entidad tomó esta medida para proteger los intereses de clientes, empleados y accionistas y que la decisión correspondió "única y exclusivamente" a la dirección del máximo órgano de gobierno del banco.
CaixaBank ha logrado en los nueve primeros meses del año un beneficio de 1.488 millones de euros, un 53,4 % más que en el mismo período de 2016, lo que supone el mejor resultado de la historia del grupo en los tres primeros trimestres, gracias a la integración del banco portugués BPI.
CaixaBank ha conseguido asimismo su mayor beneficio trimestral, con 649 millones entre julio y septiembre, un 48,7 % más que en los tres meses anteriores, según ha informado la entidad, que recientemente ha trasladado su sede social y fiscal de Barcelona a Valencia debido a la crisis política en Cataluña.
Desde su integración, el pasado mes de febrero, BPI ha contribuido a los resultados del negocio de CaixaBank con 180 millones de euros, de los que 103 corresponden al tercer trimestre del año.
Hasta septiembre, el banco que preside Jordi Gual y cuyo consejero delegado es Gonzalo Gortázar ha aumentado en un 9,3 % su margen bruto, hasta 6.491 millones de euros, debido en parte a la mayor generación de ingresos del negocio bancario (margen de intereses, comisiones e ingresos del negocio de seguros), que permiten compensar los menores resultados derivados de activos y pasivos financieros.
En concreto, el margen de intereses crece más de un 15 % interanual, hasta 3.550 millones, mientras los ingresos por comisiones alcanzan los 1.867 millones de euros, un 20,8 % más. Por su parte, el margen de explotación aumenta un 7,7 %, hasta 3.039 millones.
Los gastos de administración y amortización recurrentes se sitúan en el período en los 3.343 millones (+11,5 %) y reflejan principalmente la incorporación de BPI, operación que ha supuesto este año unos costes extraordinarios de 109 millones.
No obstante, los dos acuerdos de prejubilaciones suscritos en 2017, asegura CaixaBank, supondrán un ahorro anual de 104 millones.
A cierre del tercer trimestre, las ganancias/pérdidas por activos y pasivos financieros y otros se reducen hasta los 287 millones (-60 %) y los ingresos de la cartera de participadas aumentan un 11,7 %, hasta 614 millones.
Ello permite absorber el impacto de la venta del 2 % de la participación de BPI en el angoleño BFA (-97 millones atribuidos) registrado en enero antes de la toma de control, y cambios de perímetro, según destaca CaixaBank.
Los recursos totales de clientes gestionados por el grupo financiero se sitúan en 350.014 millones, con un aumento del 15,2 % en 2017 tras la incorporación de BPI (+11,5 %, 34.773 millones).
Concretamente, en CaixaBank los recursos de clientes se incrementan un 3,7 % en 2017, lo que representa 11.346 millones más, con una evolución trimestral ligeramente positiva (+0,3 %), pese a que se trata de un trimestre "habitualmente marcado por la reducción de los recursos gestionados".
En CaixaBank, la cartera crediticia bruta se reduce un 1,5 % y la cartera sana un 1,1 % a lo largo de este año.
En este sentido, destaca la evolución positiva del crédito a empresas expromotor, con un incremento del 1,8 % en el año, y del crédito al consumo, con un aumento del 18,9 %.
La ratio de morosidad del grupo se sitúa en el 6,4 %, una décima menos que hace un año, y la ratio de cobertura de la cartera dudosa mejora hasta el 50 %.
Las dotaciones para insolvencias llegan a 658 millones, lo que supone un 5,5 % menos que en el mismo período de 2016.
El apartado de otras dotaciones a provisiones asciende a 800 millones, e incluye, principalmente, el registro de 455 millones asociados a prejubilaciones (152 y 303 millones en el primer y segundo trimestre del ejercicio, respectivamente) y 154 millones de saneamiento en Sareb.
Por su parte, la rentabilidad del grupo mejora desde diciembre 235 puntos básicos y se sitúa en el 8 %, mientras que el ROTE recurrente del negocio bancario y asegurador alcanza el 10,5 %, con un resultado de 1.490 millones en los nueve primeros meses.
CaixaBank mantiene el liderazgo en banca minorista en España, con una cuota de penetración como primera entidad del 26,7 % y la primera posición en nóminas domiciliadas (26,6 %) y en seguros, planes y fondos por recursos gestionados (21,8 %).
La entidad mantiene asimismo el liderazgo en banca por internet, con 5,6 millones de clientes, y en banca móvil, con 4,1 millones.
Sus activos líquidos totales se sitúan en 71.581 millones y su ratio Common Equity Tier 1 (CET1) fully loaded es del 11,7 % a 30 de septiembre, casi 3 puntos porcentuales por encima de los requerimientos del supervisor del 8,75 %.