MACROECONOMÍA ANÁLISIS
La economía de Lleida creció un 2,6% el año pasado, la tasa más baja de Catalunya
El estancamiento de la construcción y el moderado comportamiento de los servicios lastran los resultados, según el Anuario del BBVA|| El llano creció a una tasa del 2,9% y las comarcas de montaña al 0,9%
La economía de la provincia de Lleida creció el año pasado un 2,6%, la tasa más baja de toda Catalunya, donde se registró un promedio del 3,4%. Así consta en el Anuario Económico Comarcal 2017 de BBVA, elaborado en colaboración con el catedrático emérito de Economía Aplicada de la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB), Josep Oliver, y que analiza la distribución territorial del crecimiento económico catalán. Tiraron en especial del Valor Añadido Bruto (VAB) Barcelona (3,5%) y Girona (3,2%), mientras que la economía de las comarcas de Tarragona también evolucionaron a una tasa inferior a la catalana (2,9%).
Por ejes, destacó la evolución de la Catalunya Central (4%), el Eje de Girona (3,2%), el Metropolitano de Barcelona (3,5%) y el del Camp de Tarragona (3,0%). El Pla de Lleida se sitúa en la banda baja de crecimiento (2,9%) junto con Terres del Ebre (2,3%), mientras que las comarcas de montaña se encuentran a la cola (0,9%).
Solo tres comarcas registraron una nueva caída de sus economías: los dos Pallars y la Val d’Aran
En el caso del llano de Lleida, la evolución de la economía se ve marcada por el estancamiento de la actividad constructora, que incluso sigue cayendo en comarcas como la Segarra (-1,6%), Les Garrigues (-0,9%) o la Noguera (-0,5%). Además, el sector servicios tiene un crecimiento (1,7%) mucho más moderado que el promedio catalán (3,1%). En el caso de las comarcas de montaña, es la industria la que lastra sus resultados (-3,2%). Solo la industria del Alt Urgell logra cerrar en positivo, frente a caídas del resto, con especial relevancia en los casos de la Val d’Aran (-6,2%), el Pallars Jussà (-6,5%) y el Pallars Sobirà (-6,6%). Pasa factura los estragos causados por la sequía y su repercusión en la generación de energía hidroeléctrica. En el lado opuesto de la balanza se encuentran los sectores industriales de tres comarcas del Lleida, con crecimientos por encima del 4%. Son el Pla d’Urgell (5,1%) y el Solsonès (4,2%), el Urgell (4,5%).
En el caso del sector primario, el estudio liderado por Josep Oliver sitúa Les Garrigues (9,7%), Noguera (15,3%) y Pla d’Urgell (15,6%) entre los líderes. En este capítulo hay que tener en cuenta los incrementos de producción tanto de fruta dulce y aceite de oliva como la evolución de las cabañas ganaderas, en especial en porcino.
El informe apunta que tan solo tres comarcas catalanas registraron caídas del VAB el pasado año y las tres son leridanas: Pallars Sobirà (-2,1%), Pallars Jussà (-0,9%) y la Val d’Aran (-0,5%).
El PIB catalán continúa con la mejoría iniciada en el año 2013 El informe del BBVA destaca que en 2016 continuó la mejora iniciada en la segunda mitad de 2013 en la economía catalana, por lo que el PIB a precios de mercado catalán avanzó un 3,5%, mejora que se tradujo en un aumento del 3,7% de la afiliación a la Seguridad Social, unos 112.000 nuevos afiliados. Por sectores, los servicios experimentaron un repunte del 3,1%, gracias a la mejora en la hostelería, el transporte y la información y comunicaciones, mientras que el VAB industrial aumentó un 4% debido al dinamismo de las manufacturas y, en particular, de textil, metalurgia, fabricación de productos metálicos, maquinaria y equipo y caucho y plásticos. Además, el VAB de la construcción se incrementó en un 3,2%, mientras que el sector primario lo hizo en un 10,1%, pero sólo el sector de los servicios, con 2,4, millones de ocupados en 2016, fue capaz de superar el nivel de empleo previo a la crisis.