Telefonía y peajes cotizan al alza

Los precios de los peajes y de las tarifas de telefonía serán más elevados en el año que empieza mañana. En este sentido, cruzar el túnel del Cadí será 18 céntimos más caro, mientras que viajar de Lleida a Barcelona en coche por la AP-2 supondrá el pago de 30 céntimos más. Por lo que respecta a las líneas de telefonía, las principales operadoras prevén (o ya han aplicado) cambios al alza en sus tarifas, sobre todo en los precios de las ofertas que aúnan internet, líneas de teléfono y televisión. Telefónica subirá 5 euros al mes sus paquetes Movistar Fusión en febrero y la directora ejecutiva de Vodafone España, Laurent Paillassot, explicó que “vamos a seguir dando más volumen de datos a nuestros clientes, y eso tiene un precio”, tras anunciar la última subida de las tarifas.

Pero no todo son malas noticias, porque hay muchos precios que se mantienen. Así pues, comprar una T-10 para viajar en autocar por Lleida seguirá costando lo mismo que este año (9,80 euros) y subirse al tren de La Pobla para llegar desde la capital del Segrià a esta localidad del Pallars Jussà tampoco será más caro (el precio se mantiene en los 7 euros). Asimismo, la Agència Catalana de l’Aigua ya anunció a finales de octubre que no subiría el canon del agua, una decisión que vino motivada por “la estabilidad financiera de la agencia”.

Viajar de Lleida a La Pobla seguirá costando 7 euros en 2018 y la T-10 mantiene su precio en 9,80 euros

Además, las principales localidades de la demarcación y las capitales de comarca prepararon las ordenanzas para el año que viene con el objetivo de cuadrar ingresos y gastos en las cuentas de 2018 y lo hicieron, por una parte, congelando impuestos como el de Bienes Inmuebles (IBI) para que las subidas del Catastro no castiguen tanto al bolsillo del contribuyente, y por otra, creando nuevas y originales tasas para compensar la caída de ingresos todavía a causa de la crisis. Un ejemplo podría ser Solsona, que ha creado un impuesto para el alquiler de la tapa frigorífica de la caja de los servicios funerarios de la localidad para ofrecer la posibilidad de llevar a cabo velatorios de los difuntos fuera del tanatorio.

Por su parte, la bombona de butano subió un 2,1 por ciento el pasado mes de noviembre, con un precio máximo de 14,45 euros, y no se revisará hasta el tercer martes de enero.

Lleida

El recibo de la electricidad se ha encarecido notablemente a lo largo del mes de diciembre. Así, en las tres primeras semanas su precio era un 4,6% superior al mismo periodo de noviembre, culminando así un mal año para el bolsillo de las familias. Y es que según ha puesto de manifiesto la asociación de consumidores Facua, el importe que un usuario medio ha pagado en 2017 por la luz se ha disparado más del 10% con respecto a 2016, lo que supone que el coste medio anual por hogar es ya de 907,08 euros, 88,63 más que en el anterior ejercicio. Esta evolución se explica por el hecho de que las eléctricas han encarecido un 12,11% el importe que cobran por la energía consumida, aunque el Gobierno ha mantenido congelada la parte regulada de la tarifa, que supone en torno al 60% del recibo de la luz. Este incremento resulta aún más espectacular si se tiene en cuenta que España es el país europeo donde el precio de la luz antes de impuestos es más cara. Según un informe de Eurostat con datos del primer semestre de 2017, es un 30% superior al de Portugal y también es más alto que en Irlanda y Gran Bretaña, que tienen peores niveles de interconexión y precios mayoristas más altos al ser sendas islas. La cuesta de enero a nivel energético será aún más dura porque el recibo del gas se encarecerá con motivo de su revisión trimestral nada menos que un 6,6% este mes de enero para todos los hogares que lo utilizan para su calefacción. En el caso de los que únicamente lo tienen contratado para la cocina y el agua caliente, el aumento será algo menor, del 4,9%.

Los precios de la gasolina y el gasóleo en máximos de 2015Los precios del sector de los carburantes empezarán el año al alza, debido, entre otros factores, a las subidas en los precios de la materia prima, con un barril de crudo instalado por encima de la cota de los 60 dólares. Así, el precio del petróleo de Texas (WTI) cierra 2017 en los 60,42 dólares el barril, con una revalorización anual del 12,5% y las perspectivas de precios a inicios de 2018 son al alza. Asimimo, el barril de crudo Brent subió a 66 dólares, al nivel de junio de 2015. Así las cosas, los precios de la gasolina y del gasóleo están en máximos anuales coincidiendo con las Navidades. El precio medio del litro de gasóleo se sitúa en los 1,137 euros, su nivel máximo desde julio de 2015, según el Boletín Petrolero de la UE, mientras que el precio del litro de gasolina alcanza los 1,235 euros.