CARBURANTES NORMATIVA
Las cooperativas advierten que peligran sus 30 gasolineras en Lleida
Por una normativa del ministerio de Industria que dificulta el repostaje de los tractores, entre otros aspectos|| El sector defiende que dan servicio al mundo rural
Josep Lluís Escuer, ayer repostando en la gasolinera de su cooperativa en Rosselló.
La Federació de Cooperatives Agràries de Catalunya (FCAC) advierte que el ministerio de Industria pone en peligro la treintena de gasolineras que tiene el sector en las comarcas de Lleida con una normativa “absurda y que solo pone palos en las ruedas”. El responsable de la sectorial de suministros de la FCAC, Josep Lluís Escuer, se refería ayer así al real decreto que entró en vigor en noviembre pasado (da un año al sector para adaptarse) y el borrador de guía técnica con las limitaciones previstas para las estaciones de servicio sin personal, en las que se incluyen tanto las denominadas low cost como las de cooperativas.
Escuer recordó que algunas autonomías habían comenzado a legislar contra las gasolineras sin personal, por lo que el sector presentó el caso ante la Unión Europea ante la disparidad de normativas. Bruselas entonces requirió a España un pronunciamiento al respecto. Fue, según la FCAC, cuando el ministerio recuperó el real decreto que llevaba “seis años en el cajón”. Ahora se debe aprobar una guía técnica para las estaciones de servicio y se han disparado todas las alarmas. Entre otras cosas, explica Escuer, prevé que como se pueda repostar cada vez un máximo de 75 litros y si se necesita más carburante se deba iniciar un nuevo proceso. Es decir, se habría de colgar la manguera del combustible, volver a poner la tarjeta de crédito con el número pin y cargar de nuevo. Recordó que un tractor puede tener un depósito de 200 hasta 500 litros, lo que da idea del problema que supone. Además, prevé que deban tener un sistema de videovigilancia operado por terceros, con un coste estimado de 1.200 euros mensuales y que las cooperativas ven inasumible. Asimismo, el borrador de guía prevé obligar el cierre de estas instalaciones cuando el viento supere los 18 kilómetros por hora, medidas todas ellas que pondrían en peligro unas 70 gasolineras de cooperativas en Caytalunya y un millar en toda España. La FCAC considera ilógicas estas medidas y recuerda que en los países nórdicos prácticamente todas las gasolineras son automáticas. Además, destaca la “labor social de las cooperativas porque en muchas poblaciones en el mundo rural solo tienen la gasolinera de la cooperativa”.
