POLÍTICA ECONÓMICA
Bruselas pretende recortar un 5% los fondos agrarios en el primer presupuesto 'postbrexit'
Cerca de 20.000 payeses de la provincia reciben ayudas de la UE, que suman unos 160 millones de euros anuales || El 2% del recorte corresponde a primas directas y el 15%, a líneas de desarrollo rural
La Comisión Europea presentó ayer su primer presupuesto “postbrexit” para el período 2021-2027, y como temían los agricultores prevé un recorte de los fondos para el campo cifrado en un 5%, rebaja también aplicable a la política de cohesión. Las ayudas a la Política Agraria Común (PAC) se cifran en 365.000 millones de euros en esa propuesta. El presupuesto global de la UE ascendería hasta los 1,28 billones y significa que para los próximos siete años pasaría del 1,03 % del PIB conjunto de los Veintiocho que supone hoy a representar el 1,11 % del PIB de los 27 Estados que permanecerán en el club comunitario tras la salida del Reino Unido. Este presupuesto plurianual será el primero sin los británicos, que dejarán un agujero en las cuentas comunitarias de 12.000 millones de euros.
La PAC tiene gran importancia para las comarcas de Ponent. El sector agrario de Lleida recibió en 2016, un total de 163 millones del Fondo Europeo Agrícola de Garantía (Feaga) y del Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (Feader). Ese año cobraron algún tipo de ayuda 19.936 beneficiarios, lo que representa un promedio de 8.176 euros por perceptor. Sin embargo, no llegan a todos los payeses y, por ejemplo, los productores de porcino carecen de ayudas directas, al igual que los fruticultores, mientras que sí los perciben otros como los cerealistas.
Unió de Pagesos advierte que la propuesta de la Comisión producirá más recorte de renta del payés
El proyecto presentado ayer por la Comisión Europea apunta políticas que ni el Gobierno estatal ni los payeses querían oír: Bruselas propone recortar un 10% la cofinanciación de la UE en programas de desarrollo rural. El comisario de Agricultura y Desarrollo Rural, Phil Hogan, animó ayer a que los países cubran la brecha que dejaría la reducción de fondos europeos para que de esta forma no se vean reducidas las ayudas a sus sectores agrarios. “Si los Estados miembros deciden cubrir este agujero en el desarrollo rural, significaría que no habrá recortes”, afirmó, para después precisar a modo de ejemplo que esto supondría unos 180 millones anuales en el caso de España.
La Comisión quiere que el “25% del gasto” de los programas agrarios y de cohesión contribuyan a cumplir objetivos de la lucha contra el cambio climático. También apuesta por establecer un tope en los pagos directos de la futura PAC de 60.000 euros por explotación. El responsable de Agricultura comunitario garantizó que los pagos directos no caerán más del 3,9% en ningún Estado miembro. Al mismo tiempo, apuntó que los Estados miembros podrán utilizar los ahorros de este tope máximo conocido como ‘capping’ de 60.000 euros para redistribuir las ayudas a explotaciones pequeñas y medianas. “Si tienes en cuenta el ‘capping’ (...) y el sistema de redistribución de pagos que vamos a introducir, el impacto de los recortes será menor para pequeñas y medianas explotaciones”, defendió. En concreto, el irlandés detalló que serán 16 los Estados miembros que verán reducidos en aproximadamente un 3,9% los pagos directos, seis en los que caerán por debajo de esta cifra y otros seis en los que aumentarán.
Unió de Pagesos alertó de que la propuesta comunitaria supondrá un significativo recorte de la renta de los agricultores catalanes. Advirtió de un recorte que cifra en un 2% en las ayudas directas y de un 15% en las destinadas al desarrollo rural. Añadió que esta política de reducción de fondos supondrá en la práctica un incremento sustanción de la competencia desleal en el mercado único en favor de las importaciones de terceros países. Considera que dificultarán a los agricultores hacer frente a los retos de la seguridad alimentaria, el uso sostenible de los recursos y el crecimiento.