Lleida ha perdido 5.700 beneficiarios de ayudas de la PAC desde 2009

Lleida ha perdido desde 2009 un total de 5.691 beneficiarios de las ayudas de la Política Agraria Común (PAC). Así se desprende del último balance oficial hecho público por el Fondo Español de Garantía Agraria (Fega), dependiente del ministerio de Agricultura. En concreto, el año pasado recibieron algún tipo de ayuda 19.306 perceptores, la mayoría de ellos agricultores individuales pero también cooperativas y sociedades, frente a los 24.997 que llegaron a percibir algún tipo de fondos en 2009. Esta reducción pone de manifiesto el paulatino descenso en el número de productores que, en muchas ocasiones, se ven compensado en buena parte en términos de producción por las grandes explotaciones o empresas, que cada vez copan más terreno, e incluso por la entrada en el sector primario de empresas en principio ajenas al mismo.

El año pasado las ayudas que llegaron de Bruselas para las comarcas de Ponent alcanzaron los 172,8 millones de euros. La cifra representa un repunte de prácticamente diez millones con respecto a los 162,9 del ejercicio anterior. Esta evolución se explica por el incremento de dinero llegado del Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (Feader). Es esta una línea financiera, únicamente en gestión compartida, dirigida a los programas de desarrollo rural. En este caso los fondos suelen fluctuar en la medida que se ejecutan o no los planes. El año pasado alcanzó los 38,1 millones frente a los 21,9 de 2016. Según los datos del ministerio de Agricultura, en 2011 llegaron por esta vía más de 54 millones.

Sin embargo, las ayudas directas que llegan del Fondo Europeo Agrícola de Garantía (Feaga) registraron un nuevo retroceso, al pasar de 141 millones de euros a 134,6. Llegan del Feaga, por ejemplo, las ayudas que reciben los cerealistas, los productores de vacuno sectores claves en comarcas de Lleida como el aceite de oliva o el almendro. Desde 2007 ha habido oscilaciones en las ayudas, siendo 2015 el ejercicio con más fondos directos (142,7 millones) y 2010 el de menor importe (127,9), coincidiendo con cambios en la PAC.

lleida

El sector agrario ha lanzado la voz de alarma ante la propuesta de reforma de la Política Agraria Común por parte de la Comisión Europea, dado que prevé un recorte de fondos para el campo que, en esta ocasión, sería uno de los grandes perjudicados del Brexit y del agujero que supone para el presupuesto de la Unión Europea. La ministra de Agricultura, Isabel García Tejerina, ha afirmado en el Congreso que las ayudas directas en la nueva Política Agraria Común para el período 2020-2027, tal y como se plantean actualmente, caerían un 3,5%, aunque ha dicho que “el objetivo es que no haya ninguna bajada”.

Las organizaciones agrarias no se creen esta cifra y advierten, entre otros puntos, que teniendo en cuenta la inflación el recorte de ingresos sería mucho más importante. Es decir, que muchos payeses temen que estemos ante una nueva rebaja de renta por parte de agricultores y ganaderos.

Las primas de la PAC son claves para que muchos productores puedan cuadrar su cuenta de resultados. Teniendo en cuenta, por ejemplo, el nivel de cotizaciones de los cereales, los números rojos están garantizados y las ayudas comunitarias ayudan a paliar la crisis. Otros sectores importantes en Lleida y que reciben ayudas son, por ejemplo los del bovino, el aceite de oliva o los frutos secos.

Pese a que hay otros, como el porcino, que carecen de primas, sí se pueden considerar como beneficiarios en alguna medida indirectos de la PAC. aunque la soja de los piensos venga mayoritariamente de EEUU, la cebada llega de campos europeos que sí se ha producido con ayudas comunitarias. En el caso de la fruta dulce, nos encontramos con un sector que carece de ayudas directas, pero sí puede acceder a algunos fondos de apoyo a las organizaciones de productores o para financiar retiradas en caso de crisis.