AGRICULTURA IRTA
La producción de almendra puede superar los 3.000 k/ha
Nuevas variedades y manejo pueden permitir estas puntas de cosecha en Lleida || 400 payeses en las jornadas de Les Borges
La producción de almendras en una finca de secano de Lleida apenas representa los cien kilos en grano por hectárea, pero alcanza los 1.500 o 2.000 kilos en caso de explotaciones de regadío. Son dos cifras que ponen de manifiesto la diferencia de productividad en función del agua. Pero existen otros parámetros que pueden incluso elevar la producción a puntas de 3.000 kilos por hectárea, e incluso superarlos. Así lo explicó en Les Borges Blanques el especialista del Institut de Recerca i Tecnologia Agroalimentàries (IRTA) Xavier Miarnau en el marco de la X Jornada de l’ametller celebrada ayer, a la que acudieron 400 agricultores. Esta fue una sesión con las ponencias en catalán y hoy esperan repetir el éxito de participación con la jornada en castellano.
Xavier Miarnau explicó que en Estados Unidos y Australia, líderes en el sector de este fruto seco, se han conseguido esas puntas de productividades. En la provincia de Lleida también se pueden dar con la combinación no solo del riego, sino de otros parámetros, como son el cultivo de variedades “nuevas” y con un modelo agronómico adecuado. Hablamos, por ejemplo, de una fertilización y poda en óptimas condiciones.
En años con condiciones óptimas de agua, fertilización y poda en las variedades “nuevas”
Recordó que el “boom” de las nuevas variedades se produjo hace ya varios años, entre el 2007 y el 2010, principalmente. Hablamos de almendros de floración más tardía que las variedades tradicionales, lo que permite reducir el riesgo de pérdidas por heladas. Suelen ser, además, variedades autofértiles y, en algunas ocasiones, tolerantes a ciertas enfermedades.
La jornada organizada por el Institut de Recerca i Tecnologia Agroalimentàries contó, entre otros, con la ponencia del jefe del servicio de Agricultura de la conselleria Balear del mismo nombre, Andreu Juan, quien explicó cómo están actuando después de la detección de la xylella fastidiosa. Habló, por ejemplo, del manejo y las restricciones de movimiento de material vegetal que aplican para evitar que la bacteria, que supone una amenaza para producciones como el olivo o el almendro, se propague.