El pedrisco daña casi 500 hectáreas de frutales, olivos y almendros

La tormenta de pedrisco que descargó el martes en las comarcas del Segrià y Les Garrigues causó daños en 491 hectáreas de frutales, almendros y olivos, según el informe elaborado por la conselleria de Agricultura. Los daños son muy dispares y oscilan entre el 20-40% en las zonas con menos pérdidas y entre el 70 y el 90% en las fincas con los mayores destrozos. La población con mayor superficie afectada es Aspa, con doscientas hectáreas, de las que 120 corresponden a almendros arrasados entre un 70 y un 90% y las otras 80 se destinan a olivos con pérdidas de producción del 15 al 25%. A ellas se suman L’Albi y les Borges, en Les Garrigues, y Aspa, Torres de Segre, Sunyer y Alfés, en el Segrià.

El frente del martes fue acompañado de granizo y fuertes vientos en algunas zonas del Segrià y Les Garrigues, especialmente en los municipios citados, llegando con poca intensidad y mezclada con mucha agua a otras localidades, como Artesa de Lleida, según Agricultura. El tamaño del granizo caído fue de entre un garbanzo y una nuez, lo que da una idea del poder destructor en algunas zonas.

El granizo descargó ayer con fuerza en diversos puntos de Les Terres de l’Ebre

Los cultivos más afectados son la fruta de pepita, el almendro y el olivo, con daños muy variables. Estos daños básicamente han sido la caída de frutos, explica el departamento que dirige Teresa Jordà. Cabe destacar la virulencia de la piedra en Aspa, donde aparte de daños al fruto también hay daños en el árbol, y habrá que hacer tratamientos para evitar que futuras cosechas se vean comprometidas por esta granizada.

Hay que tener en cuenta que la superficie correspondiente a fruta dulce de hueso está prácticamente toda recolectada, mientras que la superficie recogida de fruta dulce de semilla se estima en un 50 por ciento.

Las zonas menos afectadas se prevén daños de entre el 10 y el 25 por ciento de la producción, con piedras de unos 0,5 a 1 cm de diámetro, pero las más afectadas, los daños pueden llegar hasta el 70-90 por ciento, explicó el departamento.

Las alertas de nuevas granizadas ayer se quedó en alarma ya que no llegó a las zonas agrícolas de la provincia, aunque sí afectó a otros puntos de Catalunya. Concretamente, Les Terres de l’Ebre eran al cierre de esta edición las más afectadas. En La Sènia se recogieron 64 litros por metro cuadrado. En Ulldecona se llegó a los 51 litros y en el observatorio situado al pie del Mont Caro se contabilizaron 48 hasta primera hora de la noche.