Melocotón y nectarina cuadruplican su precio desde el campo a la mesa

El precio de melocotones y nectarinas se multiplica prácticamente por cuatro desde lo que se paga en origen a lo que llegan a abonar los consumidores por llevárselos a casa. Es lo que afirma el Índice de Precios en Origen y Destino de los Alimentos (IPOD) elaborado por JARC-COAG referido al pasado mes de agosto. En concreto, apunta que un kilo de melocotón se valoraba el mes pasado en origen a 0,48 euros por kilo, mientras que en el caso de la nectarina se elevaba mínimamente a 0,51 euros. Esa fruta, sin embargo, se vendía al consumidor final a un promedio de 1,88 y 2,02 euros por kilo, repectivamente. Representa unos incrementos del 292% y del 296%.

La fruta de hueso se sitúa entre los alimentos que más se encarecen, pero la palma se la llevan sandías y melones. Los productores apenas reciben entre 0,11 y 0,19 euros por kilo, pero en los puntos de venta se comercializa a 0,96 y 1,46. Es decir. Se disparan un 773%, en el caso de las sandías, y un 668%, en los melones.

El PSC pide medidas contra el pedrisco, con apoyo financiero y estudiar un seguro de renta

Los agricultores, no únicamente los productores de fruta, ven en estas diferencias de precios su gran problema. Acusan a la gran distribución de presionar los precios a la baja, llevando en muchas ocasiones a que los payeses se vean forzados incluso a vender por debajo de costes de producción, una situación que en el caso de la fruta ha sido especialmente grave en los últimos años desde que Rusia impuso el veto a la fruta comunitaria.

En otro orden de cosas, el diputado del PSC por Lleida en el Parlament, Òscar Ordeig, afirmó ayer que “el Govern de la Generalidad debe dar una respuesta y soluciones definitivas a los afectaciones que las granizadas que padecemos cada verano, y especialmente este, están provocando en nuestra agricultura”. Insistió en la necesidad de que “el departamento de Agricultura, como viene siendo la tónica de este Govern, se limita a hacer estimaciones y promesas agarrándose a aquello de que qui dia passa, any empeny” y añadió que “lo que toca es agilizar las peritaciones” afectadas por el granizo y que los afectados puedan cobrar las indemnizaciones lo antes posible. Apuntó otras propuestas como “facilitar el apoyo financiero para la contratación de seguros y estudiar un seguro de ingresos que cubra las pérdidas por daños climáticos y crisis de mercado, tal y como se acordó en el monográfico sobre agricultura y mundo rural que tuvo lugar en el Parlament en 2014”.