SECTOR PRIMARIO
Agricultura sondea apoyos para arrancar frutales
Pregunta a los agricultores su posible adhesión al plan || Mientras la Generalitat negocia su financiación con el ministerio
Imagen de la jornada celebrada ayer en Lleida por Asaja.
La conselleria de Agricultura está sondeando a los agricultores para conocer su disposición o no a adherirse al plan de arranque de frutales de hueso que está negociando con el ministerio. En la última mesa sectorial de la fruta, el departamento que dirige Teresa Jordà anunció el envío de una serie de cartas a los productores que están inscritos en el Registro de la fruta. El mensaje apunta que el ministerio quiere tener un nivel de efectividad garantizado para cerrar un acuerdo sobre el arranque, que sería financiado por las dos administraciones. Es decir, Madrid quiere que se cuantifique que habrá suficientes productores y hectáreas que se acojan a la medida.
Por ello, la conselleria se dirige a los payeses para que indiquen si estarían dispuestos a sumarse al arranque subvencionado. En caso afirmativo, quiere conocer la superficie y las variedades que estaría dispuesto a arrancar. La conselleria querría tener las respuestas el próximo 18 de enero para agilizar negociaciones y puesta en marcha de la medida.
El plan prevé ayudas de 5.000 euros por hectárea con un máximo de tres por titular de explotación
La Generalitat recuerda que su plan prevé una indemnización de 5.000 euros por hectárea arrancada, con una superficie máxima de tres hectáreas por titular de explotación. Como contrapartida, el agricultor se compromete a no plantar árboles de melocotón, nectarina ni paraguayo en cuatro año a partir del acceso a la ayuda. El período para hacer efectivo el arranque se anuncia en los años 2019 y 2020.
Por otra parte, Asaja Lleida presentó ayer la propuesta del plan de arranque en un acto público en Lleida. Reclama desde hace cuatro años una propuesta para revertir la situación crítica que atraviesa este sector, señalando entre otros puntos, la saturación del mercado comunitario agravado por el vero ruso a las producciones europeas y al incremento de la producción en los últimos años. El informe presentado por la organización agraria apunta que en los últimos cinco años han disminuido el número de fruticultores en un 15%. Reclama una intreprofesional del sector y contener los costes energéticos y laborales.
