ENTREVISTA ANÁLISIS
Josep Maria Riu: «Lleida puede ser un polo industrial»
JOSEP MARIA RIU | presidente del Col•legi d’Economistes de Lleida
¿Cómo se ha encontrado el Col.legi d’Economistes de Lleida?
Tiene una salud envidiable, con 425 colegiados y 78 despachos profesionales. Presta servicios en aspectos como la formación de primerísima calidad, clave en un mundo cambiante. También tenemos un servicio de business angels. El Col.legi se organiza en diferentes comisiones por ámbitos de intereses de los colegiados: fiscal, auditoría, concursal, economía financiera, urbanismo y economía de la salud y del tercer sector.
¿Cómo valora la situación actual de la economía de Lleida tras la última crisis económica?
Sigue manteniendo una gran importancia el sector agroalimentario, parte en la actividad primaria y parte en la industria, lo que es una buena noticia. Hemos pasado a que la industria tenga más peso. Por otro lado, quizás se puede apreciar una excesiva dependencia de los servicios, teniendo en cuenta además que su evolución depende mucho del ciclo económico.
¿Qué le falta a Lleida?
Quizás nos faltaría más industria. Se ha intentado en los últimos 20 años, con la puesta en marcha de polígonos industriales, la ciudad región y el AVE... pero llegó la crisis y en buena medida se truncó. Estamos haciendo estructura económica, aunque tal vez a un ritmo un poco más lento que otras demarcaciones por el tipo de territorio y empresas que tenemos. No es una situación negativa, pero no hemos de conformarnos. Somos ambiciosos y hemos de serlo aún un poco más. La situación geográfica de Lleida es importante, podría ser un polo industrial, algo que nos blindaría para una eventual próxima recesión.
El turismo ha ganado protagonismo...
Es un gran puntal en especial en la montaña porque se ha profesionalizado y ha desestacionalizado su actividad.
Algunos expertos augura una nueva crisis a corto plazo ¿Qué opina?
De momento los datos son muy tercos (ríe) y la crisis no se ve por ningún lado. Lo que hemos aprendido estos últimos años nos servirá ante una nueva recesión. Hemos desarrollado infraestructuras y tenemos capacidad de atracción porque podemos ofrecer calidad de vida y servicios que no teníamos hace 20 años. Seguimos teniendo la niebla, pero se nos ve. En Lleida hay espíritu emprendedor y se potencia el dinamismo económico. Ofrecemos muchas cosas a la gente que quiere colaborar y, en esta línea, el Parque Científico es un ejemplo de atracción. Hay que saber vender Lleida.
Una incógnita es cómo reaccionará la economía a la retirada de estímulos por parte del Banco Central Europeo.
Tenemos la experiencia previa de EEUU, que ha salido de la crisis mucho más rápido que Europa. La Reserva Federal tomó medidas más rápido, con la reducción de tipos de interés y al apreciar la recuperación de la economía y la vuelta de la inflación empezó a recortar estímulos. Hoy tiene el precio del dinero por encima del 2,5% y vive su ciclo de crecimiento económico más largo desde el crack del 29. El BCE considera que hoy no necesita estimular la economía artificialmente. A la economía le afecta de forma negativa la incertidumbre, las noticias inesperadas, pero el BCE lleva un año avisando del fin de los estímulos y, viendo los resultados en EEUU, en Europa el camino no tiene porqué ser diferente.
¿Tenemos que hacernos a la idea de subidas de tipos de interés?
Estarán bajos una temporada, aunque eso no quiere decir que tengan que mantenerse al 0%, medida que ha beneficiado a empresas y particulares endeudados pero no a los ahorradores.