Los pensionistas leridanos, contra la precariedad y la pobreza energética

El colectivo Marea Pensionista Terres de Lleida salió ayer a las calles de la capital del Segrià para reivindicar que se ponga fin a la “precariedad entre pensionistas y a la pobreza energética, que afecta, sobre todo, a las mujeres viudas con una pensión mínima”. En este sentido, el portavoz de la entidad, Joan Miquel Ballester, explicó que “queremos que se garantice un suministro básico de energía. Para ello, una prestación digna es imprescindible”. También comentó que Lleida es donde menos avances se han conseguido, algo que, según Ballester, “no vamos a tolerar”. Tanto la leridana, como el resto de mareas del Estado reivindican que las pensiones se revaloricen con el IPC real y que se garantice por ley. Ballester dijo que en Europa ya se exige que la pensión mínima se cifre en los 1.080 euros al mes.

El portavoz animó a que los jóvenes “no contraten planes de pensiones”, porque los considera una “estafa”. “Parece que la intención es llevar a la gente joven a los planes privados y esto es inviable. Mucha gente ha perdido dinero”, aseguró e insistió en anular las reformas laborales para que “se pueda cobrar y cotizar más”. Lamentó la actitud del Gobierno central, que “no se ha implicado”. También aseguró que la jubilación a los 67 años implica menos empleos para jóvenes, más paro y menos cotización. Por ello, defendió la jubilación en los 65 años y ofertas de trabajo con 35 horas semanales, para crear más empleo y más cotizaciones.

Ballester también apuntó que el colectivo trabaja en 23 puntos que presentará a las candidaturas municipales para llevarlos a debate, y pondrán énfasis en la conciencia política de sus miembros. Les aconsejarán a “quienes no deben votar” para cuidar sus intereses.

La marcha de Lleida arrancó en plaza Paeria, donde el cantautor Joan Baró interpretó algunas canciones. En España, se hicieron unas 200 convocatorias, como en Barcelona y Madrid, donde los taxistas se unieron a la marcha.