ESNOTICIA
La huelga cierra la mitad de las tiendas y tiene un impacto desigual en la industria
Interrumpe la producción en la planta de Seat en Martorell y cancela más de cincuenta vuelos en El Prat || El consumo de electricidad se reduce en Catalunya un 5,4%, según Red Eléctrica de España
La huelga general cerró ayer alrededor del 50% de los comercios en Catalunya y tuvo un seguimiento desigual en el sector industrial. A ello contribuyeron en parte los acuerdos entre empresas y empleados para participar en el paro y medidas preventivas como adelantar traslados para evitar incidencias por cortes de carreteras. Estas interrupciones del tráfico y otros problemas de movilidad alteraron desde primera hora de la mañana la actividad económica. Se agravaron a mediodía con la llegada al centro de Barcelona de miles de personas, participantes en las Marxes per la Llibertat.
La huelga, convocada por los sindicatos independentistas y minoritarios Intersindical CSC y IAC, provocó la cancelación preventiva de 55 vuelos en el aeropuerto de Barcelona-El Prat, que por lo demás arrancó el día con normalidad. La convocatoria cerró por primera vez la planta de Seat en Martorell y establecimientos como los de la cadena de supermercados Bonpreu. Como consecuencia del paro, el consumo de electricidad se redujo en Catalunya un 5,4% de media hasta las 19.15 horas de ayer respecto al previsto, según el operador del sistema eléctrico, Red Eléctrica de España (REE).
Cortes viarios y problemas de movilidad alteraron el tráfico desde primera hora de la mañana
Muchas empresas llegaron a acuerdos con sus plantillas para aplicar fórmulas de flexibilidad
Según la Generalitat, la huelga, que no contó con el apoyo de los mayoritarios CCOO y UGT, tuvo un seguimiento desigual, con una elevada afectación en el comercio (entre el 60 y el 80%), la enseñanza pública (el 42,5% –donde IAC es mayoritaria–) y las universidades (90%), y menor en la función pública (35%) y la sanidad (20% en pública y concertada).
Por su parte, las patronales Foment del Treball y Pimec destacaron que los problemas de movilidad han sido un factor clave en la afectación en la actividad económica, pese a que la incidencia de la huelga en cuanto al seguimiento de los trabajadores fue desigual.Foment llegó a asegurar que la huelga, que calificó de “ilegal” por responder a “motivaciones políticas” casi “no se ha notado” en la mayoría de sectores. En la industria, la gran patronal apuntó que la incidencia del paro ha sido “mínima”, aunque muchas empresas optaron por cerrar y recuperar la producción en otras jornadas ante el temor de que los trabajadores o las mercancías no llegaran a los centros.
El caso más paradigmático es el de la fábrica de Seat en Martorell, que interrumpió ayer su producción, al igual que lo hizo la víspera, debido a las protestas independentistas, mientras que Nissan abrió con normalidad su planta de la Zona Franca.
Para conciliar el derecho a participar en las movilizaciones y sortear problemas de movilidad, muchas empresas llegaron a acuerdos con sus plantillas para aplicar fórmulas de flexibilidad y trabajar a distancia. Ello facilitó, por ejemplo, que casi el 40% de pequeñas y medianas empresas de Catalunya paralizaran su actividad, según Pimec. Por su parte, la Intersindical-CSC y la IAC consideraron un “éxito” el paro y señalaron que el seguimiento superó en una décima al del 3 de octubre de 2017.