El paro de larga duración se sitúa en su nivel más bajo desde el año 2011 en la provincia

La gravedad de la crisis económica que comenzó en 2008 disparó las cifras del paro. La recesión fue tan grave que se enquistó en muchos sectores, con especial incidencia en la construcción, y se tradujo en un aumento especialmente acusado entre los parados de larga duración, aquellos que se mantenían en las listas del desempleo del Servei d’Ocupació de Catalunya (SOC) y el SEPE (el antiguo INEM) durante más de dos años. La mejora económica ha permitido que la reducción del desempleo también se haya trasladado a este colectivo. De hecho, Lleida ha cerrado el año 2019 con la menor cifra de personas que llevaban inscritas en el SOC desde hacía más de 24 meses desde 2011. En concreto, tenía registrados en la provincia a 4.090 parados de larga duración, mientras que hay que remontarse ocho ejercicios atrás para ver una cifra similar, cuando se contabilizaban 3.990. Los peores registros llegaron a producirse en 2014, un año en el que se acumulaban 6.275 personas que buscaban una colocación sin conseguirlo al menos desde 2012.

Para tener una idea de lo abultado de estas cifras, solo hay que retrotraerse a los mejores años del empleo, en plena “década prodigiosa” como lo llamaron algunos economistas debido en gran medida al “boom de la construcción”. Hablamos del momento álgido de la burbuja inmobiliaria, cuyo estallido se tradujo en que las consecuencias de la crisis económica mundial tuviera características agravadas en el Estado español. Por ejemplo, 2007 acabó con 10.010 desempleados y de ello solo eran 1.182 los que llevaban al menos 24 meses a la búsqueda de una colocación en alguna empresa. El año pasado, las comarcas leridanas han cerrado el ejercicio con 20.416 desempleados registrados en el SOC. Es decir, que se doblan los registros precrisis. En el caso de los parados de larga duración, el balance del año pasado casi cuadruplica los de 2007.

Los últimos datos oficiales de la Generalitat sitúan el colectivo de parados más numerosos en aquellos que llevan hasta tres meses en las listas del SOC, con 8.345. A partir de ahí van bajando y se pasa a 3.008 con los que están hasta 6 meses desempleados. Entre seis y nueve meses se contabilizan 1.295 leridanos y la cifra sigue descendiendo entre quienes ya cumplen un año a la búsqueda de un puesto de trabajo, con 1.146. Hasta quince meses hay 916 parados, otros 720 que tienen hasta año y medio de permanencia en los registros y 456 más que continúan de 18 a 21 meses. Hasta los 24 meses hay otros 438.

En el conjunto del Estado, los últimos datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) reflejan que el año pasado se ha cerrado por debajo del millón de parados de larga duración por primera vez desde 2010. En concreto son 991.400 frente a los 787.700 del inicio de la pasada década.