Plusfresc cerrará los sábados por la tarde para facilitar el descanso de sus trabajadores
El estado de alerta derivado de la propagación del COVID-19 en el país ha requerido un sobreesfuerzo por parte del personal de supermercados y otros establecimientos del sector de la alimentación para satisfacer las demandas de los consumidores. Ante esta situación, la cadena leridana Plusfresc ha decidido tomar medidas que faciliten el descanso de sus empleados.
En este sentido, la compañía cerrará todos sus establecimientos los sábados por la tarde a las 15 horas con el objetivo de facilitar el descanso de sus trabajadores. De la misma forma, ha reducido su horario entre semana, cerrando a las 20 horas de lunes a viernes.
Además, Plusfresc instalará a partir del lunes mamparas de metacrilato en las cajas de todos sus supermercados. “Nuestra prioridad son y han sido siempre nuestros clientes, trabajadores y colaboradores. Ante esta situación, es nuestro deber adoptar todas aquellas medidas que contribuyan tanto a minimizar la exposición de nuestros empleados como a ofrecer la máxima seguridad y servicio a nuestros clientes”, explica Francisco González, director general de Plusfresc.
Medidas para los trabajadores
Desde que las autoridades españolas alertaron del incremento de contagios por COVID-19 entre la población, la compañía ha extremado sus medidas de seguridad en sus locales. En este sentido, Plusfresc ha aumentado la higiene y desinfección de todas las tiendas, así como de los elementos de contacto (teclados, pantallas, bolígrafos de firma, carros de la compra...). Además, se ha dotado a todas las personas que trabajan atendiendo al público de elementos de protección individual, como mascarillas, guantes, gel desinfectante y gafas de protección. Se han suprimido las devoluciones y se está promoviendo en la medida de lo posible la rotación de tareas para que la plantilla no esté más de una hora y media en un mismo puesto de trabajo.
Medidas para clientes
En lo que se refiere a sus clientes, la cadena ha limitado el número de personas que tienen acceso a sus establecimientos y dan preferencia a la gente mayor. “Tienen prioridad en la entrada de las tiendas, para efectuar su compra en las secciones de carne y pescado y también en el momento de cobro de caja”, señala González. Además, la compañía ha instalado una señalización especial para ayudar a mantener la distancia mínima de seguridad – 1 metro –, recuerda periódicamente a través de su instalación de megafonía las normas de seguridad y proporciona guantes para la compra y el uso de cestos y carros.
En este sentido, la empresa ha cerrado el espacio de degustación de sus cafeterías, la zona de Plusipark y se ha prohibido que los clientes lleven sus tupper de casa.