ESNOTICIA
El cierre perimetral del Segrià causa pérdidas al 85% de los comercios
Una encuesta de PimeComerç señala que el 72% ha podido mantener la actividad gracias a sus ahorros personales || La entidad pide microconfinamientos específicos
La afluencia a los comercios del Segrià ha disminuido notablemente desde el confinamiento, como se ve en esta imagen de ayer en el Eix.
El 85% de los comercios del Segrià ha perdido facturación por el confinamiento perimetral de la comarca, según una consulta hecha por PimeComerç a sus asociados de Lleida, Alcarràs, Alfarràs y Torrefarrera. Estos negocios generan más de 800 empleos directos y el 56% ha podido mantener la plantilla sin recurrir a un ERTE a pesar del confinamiento inicial durante el estado de alarma.
La entidad destaca que, a raíz del aumento de casos de Covid, “el Segrià ha vivido los impactos en diferentes ámbitos, en especial el económico” y señala que “la comarca disfruta de una diversidad económica que va mucho más allá del sector agroalimentario, incluyendo los sectores universitario, tecnológico, de servicios, restauración y, en especial, el comercio”.
Muchos negocios confiaban en el periodo de rebajas para “remontar” pero la medida lo ha impedido
De la misma consulta se desprende también que un 40% de los negocios afirman que se plantean el cierre en caso de un nuevo confinamiento estricto. Durante la primera ola, en la cual no pudieron mantener la actividad, el 39% recurrió a un crédito ICO , mientras que un 72% de los propietarios aportaron ahorros personales. Este endeudamiento agrava la situación del sector comercio, que ya venía de una lenta recuperación desde la crisis del 2008.
PimeComerç señala que el Segrià, y Lleida en general, fue de las últimas regiones sanitarias que inició la fase de reanudación y donde la fase 1, con restricciones en los aforos, se alargó más. Esto ha provocado que el 56% de los comercios aseguren que aún no ha notado una recuperación económica sustancial. Sin embargo, muchos habían puesto su expectativa de recuperación en las rebajas que principalmente empezaron el 1 de julio, pero con el nuevo confinamiento, las posibilidades de hacer una buena campaña de rebajas han bajado drásticamente.
Ante esta situación, PimeComerç cree que sería “más plausible” actuar en las empresas donde están los brotes, con “microconfinamientos específicos” y algunas medidas de seguridad, como la obligatoriedad de llevar mascarilla. “Este control sanitario específico permitiría velar más por la economía global de la comarca en lugar de dañarla”, concluye la entidad.
