Las negociaciones entre Nissan y los sindicatos acaban sin un acuerdo

Después de varias reuniones en las que Nissan y el comité de empresa habían acercado posiciones, ambas partes rompieron la negociación en la madrugada de ayer tras un último encuentro maratoniano. Pasada la medianoche, la automovilística japonesa puso sobre la mesa su “última” oferta a los sindicatos. Así, la compañía, que va a cerrar sus instalaciones en Catalunya el año que viene, propuso aplazar los primeros despidos hasta diciembre y se abrió a impulsar un plan de prejubilaciones para los trabajadores nacidos antes del 31 de diciembre de 1966 con el abono del 90% del salario neto. También planteó para los empleados menores de 50 años una indemnización de hasta 60 días y un tope de 42 mensualidades. Sin embargo, los representantes de los trabajadores consideraron inasumible la oferta de Nissan y exigieron que no haya despidos hasta que cierre la planta.

Así las cosas, hacia las dos de la madrugada, ambas partes se levantaron de la mesa y pusieron el punto y final al periodo de consultas del ERE, que ya se encontraba en prórroga. De esta manera, con arreglo a la normativa laboral, Nissan podría ejecutar ya el expediente si lo deseara a pesar de no haber logrado un acuerdo con los sindicatos. En este sentido, la dirección de la firma indicó que mantiene la última propuesta hasta el martes. Si para entonces los sindicatos no la han aceptado, “la empresa procederá de conformidad con la normativa vigente”. Frank Torres, responsable de operaciones industriales de Nissan Ibérica, enfatizó que “no habrá más negociaciones” y que la pelota está ahora en el tejado de los empleados. Ante este escenario, la asamblea de trabajadores de Nissan que se celebró ayer mismo en unos terrenos de Montcada i Reixac acordó mantener las movilizaciones y la amenaza de acudir a los tribunales para impugnar los planes de la empresa nipona. “Acabar en juicio frenaría una posible reindustrialización un año o más”, advirtió Torres. “Es el mejor momento para conseguir este acuerdo que garantice este plan de salida y la producción y la paz social, y que además nos dé tiempo, que es el objetivo de todos, para buscar opciones de reindustrialización e intentar conseguir que todas las personas afectadas consigan un nuevo empleo”, manifestó. Por contra, los trabajadores aseveraron que mantendrán los piquetes y que no abandonarán la lucha. “Son 40 años de historia” apuntó Miguel Ruiz, líder de USOC en la empresa.