El censo de porcino en Lleida baja ante las “trabas administrativas”

La cabaña porcina en Lleida se está reduciendo poco a poco ante la imposibilidad de su expansión. Según los últimos datos de la conselleria de Agricultura, correspondientes a la encuesta provisional de mayo de este año, el número total de animales (lechones, cerdos de engorde, madres reproductoras, etc) era de 4.217.154, lo que supone un descenso de algo más del 7 por ciento con respecto a mayo de 2019.

El descenso más acusado lo encontramos entre los lechones, con un 8,5 por ciento de ejemplares menos, hasta contabilizar 1.444.602 cerdos de menos de 20 kilos; seguido de los cerdos de engorde (-7,1 por ciento) con 1.563.267 animales, o la caída de los gorrinos de entre 20 y 49 kilos, que representa un descenso del 6,9 por ciento con respecto a mayo de 2019, con 900.329 animales. Solo el número de madres reproductoras asciende levemente: pasa de 305.508 a 307.828, un 0,7 por ciento más.

Para el responsable de porcino de Unió de Pagesos (UP), Rossend Saltiveri, el porcino catalán lleva desde hace tiempo limitado desde el punto de vista administrativo, mientras que en otros territorios del Estado crece sin las cortapisas que encuentran los ganaderos en Catalunya. Un ejemplo es el caso de la provincia de Huesca, que sobrepasa a Lleida en un 7 por ciento, con 4.516.184 cerdos.

UP explica que el sector debe adaptarse a las nuevas exigencias normativas relacionadas con sanidad, bienestar animal y medio ambiente. Estas determinan, por ejemplo, qué medidas toman las granjas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y amoniaco en el ámbito de la granja y de la gestión de las deyecciones ganaderas, su control y tratamiento. Un problema derivado de esto es que muchas son viejas y cuesta mucho adaptarlas, por lo que algunos tienden a abandonar el negocio y, al no haber relevo, disminuyen las explotaciones.

Así, si comparamos los precios de la semana 42 de este año con la de 2019, la pérdida es de un 9,89 por ciento , ya que en octubre de 2019, el cerdo cotizaba a 1,435 euros el kilo. Sin embargo, si lo comparamos con la semana 42 de 2018, el precio actual es un 20,16% mayor y de hasta un 20,2% que en el año 2015.

La peste en Alemania presiona los precios del porcino La crisis de la peste porcina en Alemania está echando por tierra los beneficios conseguidos en los últimos años gracias a las exportaciones a países asiáticos, sobre todo a China. Entre la última cotización en la lonja de Mercolleida (semana 42), de 1,293 euros/kilo y la primera, el pasado mes de enero, el precio del kilo de carne de cerdo vivo ha perdido 0,197 euros, lo que representa un descenso del 13,2%. Sin embargo, hay que recordar que las cotizaciones del año pasado fueron considerados por todos los expertos como un récord, algo que no se había visto hasta entonces.