Port de Tarragona abre mercados a la industria agroalimentaria leridana

El presidente de la Autoritat Portuària de Tarragona, Josep Maria Cruset, presentó ayer a través de una jornada online organizada por Grup SEGRE, el proyecto “Cal·lípolis Next Generation” y que, a través de una inversión prevista de unos 260 millones de euros, prevé una profunda transformación de estas instalaciones “que no solo son estratégicas para Tarragona, sino también para Lleida, de quien somos su puerto natural”. Cruset recordó que más del 10% del volumen de carga gestionado por el Port de Tarragona está vinculado a la industria agroalimentaria de Lleida y Aragón, un volumen que puede crecer “si Cal·lípolis accede a los fondos europeos, puesto que contempla 11 proyectos innovadores, entre los que destacan el desarrollo de una nueva zona de actividades logísticas, la mejora y modernización de las comunicaciones por vía terrestre (ferroviarias y por carretera), así como mejorar el frente marítimo de la Pineda, en Vila-seca.

En total, con la participación de Repsol y el ayuntamiento de Vila-seca, son 163 hectáreas de superficie para el desarrollo económico, industrial, turístico y natural que ganará esta zona.

Josep Maria Cruset, durante la jornada emitida en streaming a través de SEGRE.com y con la realización de Lleida TV, señaló que de los 6,5 millones de toneladas de sólidos gestionados por Port de Tarragona, 5 millones son de cereal, que llegan en su mayoría a Lleida para la fabricación de pienso, y avanzó que están estudiando con firmas agroalimentarias leridanas la apertura de nuevos mercados para la exportación, como es la reciente puesta en marcha del ferry que une Tarragona con Turquía y que permite trasladar producciones contenedores a este país en 96 horas, “un acuerdo que esperamos ampliar al norte de África”, señaló. Asimismo, tanto Cruset como el alcalde de Vila-seca, Pere Segura, y las palabras de clausura del responsable de Empresa y Conocimiento en Lleida, Ramon Alturo y del subdelegado del Gobierno, José Crespín, coincidieron en destacar la buena marcha de las obras del túnel del Coll de Lilla (en la A-27), el fin de los peajes de la A-7 y los estudios de viabilidad de la conexión ferroviaria del Puerto y del Eix Mediterrani con el pla de Vilanoveta de Lleida y el proyecto de 300 hectáreas de parque logístico de Torreblanca y Quatre Pilans como grandes oportunidades para sumar sinergias entre las dos capitales.