SEGURIDAD SOCIAL
La mochila austriaca, entre la flexibilidad y la seguridad
Se va llenando con la aportación mensual de la empresa || El trabajador se la lleva al cambiar de empleo o al llegar a jubilarse
Flexibilizar el mercado laboral y eliminar desventajas para empleados en sectores marcados por la temporalidad, como turismo o construcción, fue el objetivo de una reforma laboral en 2003 en Austria y que ahora propone implantar el Banco de España. La principal novedad del sistema es que el trabajador cuenta con una indemnización por despido que funciona como un fondo de ahorro, que puede mantener aunque cambie de trabajo y que el Estado incentiva utilizar como complemento a la pensión. Esta “hucha” o “mochila” se va llenando con la aportación mensual de la empresa, un 1,53% del salario bruto del empleado o de los aportes de los autónomos.
Hasta la reforma, la casi totalidad (el 96%) de los trabajadores del sector turístico, fundamental para el país, carecían de una indemnización por despido. En otros sectores, muchos empresarios despedían a sus empleados justo antes de empezar a tener derecho a un finiquito, normalmente tras 36 meses de trabajo ininterrumpido en la compañía. Con el nuevo sistema las empresas deciden mantener al trabajador en función de su productividad y no de su coste de salida, que de facto es cero.
El Banco de España defiende reformar el coste del despido e implantar la “mochila austriaca”
Actualmente, unos 3,6 millones de los 4,3 millones de los empleados y autónomos en Austria tienen una o varias “huchas” con fondos, administradas por alguna de las diez sociedades gestoras. El Estado garantiza el cien por cien de las aportaciones netas, mientras que las cajas invierten el dinero en el mercado financiero para conseguir un rendimiento del capital. Entre 2004 y 2019 la rentabilidad media anual fue del 2,37%, lejos del 6% prometido por el Gobierno cuando este modelo fue aprobado. Descontando la inflación, el rendimiento neto medio fue del 0,47%, según el sindicato GPA/djp.
El Banco de España ha recetado de nuevo esta semana reformas económicas. La “elevada desigualdad” que existe en las indemnizaciones por despido de los contratos temporales y los indefinidos es un problema que, a su juicio, se mitigaría si se reformara el coste el despido en España y se implantara la “mochila austriaca”.