Una firma de Mollerussa diseña un sistema de parking de bicicletas en altura para ciudades

La empresa Iclotet de Mollerussa ha abierto una filial en Estados Unidos y está ultimando dos proyectos novedosos de ingeniería industrial. El primero es la instalación de parkings automáticos de bicicletas en altura para su utilización en espacios públicos.

El segundo supone almacenes aéreos automáticos para el transporte de neumáticos en continuo. El CEO y dueño de la compañía, Joan Caba, explica que la empresa tiene una estrategia a largo plazo.

Su trabajo en sectores ligados a la alimentación se ha traducido en que su demanda y actividad incluso han registrado un incremento de volumen de trabajo durante la pandemia. Pero, al mismo tiempo, mantiene su estrategia de diversificación hacia otros proyectos que está desarrollando.

La empresa cuenta con 80 trabajadores y el año pasado facturó 6 millones, tras crecer un 20 por ciento

La compañía cuenta con tecnología para el transporte aéreo para colgar elementos, muy utilizados en sectores como los mataderos para mover canales de animales o en almacenes textiles. Ahora, busca adaptar esa tecnología en un mercado creciente, como es la venta de neumáticos con una demanda al alza en la comercialización a través de internet.

La firma lo está desarrollando tras contactos con empresas del sector que han visto una oportunidad en un sistema que permite el transporte constante de elementos pesados. El segundo gran proyecto en el que trabajan en la actualidad está dirigido a ofrecer soluciones de aparcamiento de bicicletas en la ciudad de una forma segura, sostenible y, además, atractiva para la fisonomía de las calles.

Se trata de parkings automáticos integrados en el mobiliario urbano y, además, en altura. El equipo directivo de la firma explica que el proyecto permite coger la bicicleta y colgarla en altura, dejando libre el espacio inferior en el que, por poner un ejemplo, se podría establecer una parada de autobús.

Se evita tener las bicicletas amontonadas en las aceras ocupando espacio y, además, ofrece al usuario un plus de seguridad. Representa una oportunidad tanto para el caso de bicicletas en alquiler, como las de uso compartido o en propiedad.

Distribuidos por la ciudad, estos aparcamientos pueden ofrecer un sistema de información a través de una app para que el usuario conozca dónde tiene plazas disponibles, además de dar un plus de seguridad para el cliente. La firma está colaborando con una empresa de arquitectura (Tecctura) para que no solo se trate de una infraestructura eficiente, sino para que su diseño sea atractivo para su integración en las ciudades.

Además de los recursos propios en los que se basa la compañía, colabora con el Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial y trabaja para conseguir fondos Next Generation, en especial en proyectos tecnológicos innovadores. La empresa tiene una plantilla de 80 empleados y facturó el año pasado seis millones de euros, tras crecer un 20%.

El 80% de sus ventas son exportaciones y dentro de su vocación exterior ha abierto una filial comercial en EE. UU. Caba adquirió esta empresa familiar en enero de 2019 en una operación que califica de amigable y que garantiza la continuidad del negocio, con Àngela Clotet Torres en la dirección comercial.