Nuestra visión es democratizar las tecnologías 4.0
El grupo empresarial Ingroup, que incluye las firmas Invelon Tecnnologies y Intech3d, desarrolla soluciones personalizadas en realidad virtuales, aumentadas y mixtas, 3D, Big Data o Internet de las Cosas para mejorar la eficiencia de las empresas
Constatar cómo se vería y comportaría un producto sin que haga falta fabricarlo. Esta es una de las múltiples posibilidades que brinda la realidad virtual. En las tierras de Ponente, debajo el paraguas de Ingroup se cobijan dos empresas, Invelon Technologies y Intech3d, que se dedican a desarrollar soluciones, que incorporan la fabricación y/o impresión 3D, la realidad virtual, aumentada y mixta, la internet de las cosas, el Big Data y la intel· ligència artificial. Lo explica su CEO, Joan Folguera.
¿En qué ámbito opera a Invelon Technologies?
Nos centramos en el desarrollo de software en realidad virtuales, aumentadas y mixtas, así como soluciones en esencia para la industria en sectores como, por ejemplo, la alimentación y bebidas. Por eso tiene importancia en el sector agroalimentario, donde aunque en Lleida empieza a implantarse, tiene un potencial enorme la tecnología 4.0.
Ustedes afirman que ayudan en las empresas a crecer a través de las tecnologías 4.0.
La idea es acercar la tecnología a unos precios asequibles, democratizar esta tecnología virtual. Así a partir de de unos 2.000 euros puede tener soluciones de realidad virtual, o realidad aumentada. Tenemos 2.500 clientes de los cuales un 90% son pequeñas y medianas empresas, aunque trabajamos también para grandes firmas como Nissan ,Grifols, Seat o Porcelanosa.
¿Cuáles son los puntos fuertes de estas tecnologías?
La tecnología es una habilitadora. El 3D tiene capacidad para adaptarse al cambio de una manera veloz, como requiere la demanda. Las impresoras un día te permiten fabricar A y otro día B. Contrariamente, en la industria tradicional si fabricas con plástico, no lo puedes hacer, sólo preparar el molde ya requiere dos meses. En cuanto a la realidad virtual, permite conectarse a miles de kilómetros de distancia ofreciendo una gran flexibilidad y adaptación.
¿Cómo se aplican?
Por ejemplo, exportamos software Printandgo.Tech en granjas de impresoras 3 D, de manera tal que se pueda monotoritzar en remoto varios parámetros de fabricación. En teleconferencias, donde se conectan varios usuarios, documentos como PDF o power point están en dos dimensiones. Pero si quieres mirar una línea principal de producción de 3D, hacen falta unas gafas virtuales que te permitan visualizar a escala 1: 1, de manera que se pueden manipular objetos e interactuar, hecho que proporciona el software Auroravr Cloud Meeting. Por lo que respecta a la realidad aumentada, se puede añadir información digital en imágenes y objetos reales, como post-it digitales.
¿Cómo habéis evolucionado?
Nuestra evolución ha sido exponencial. Surgimos en el 2015 gracias a una cátedra de emprendeduría a instancias de la UdL. El primer proyecto se centraba en la transformación digital de los comercios de la zona mediante una app. La empresa pivotaba hacia el 3D, de manera que somos un referente en 3D en el norte de España. Entre 2017 y 2018 son los mismos clientes los que nos solicitaron nuevas tecnologías con un componente más digital.
¿Y la competencia?
Nuestra competencia es la inmovilidad al cambio. De las pocas cosas positivas de la pandemia es que hemos tenido que salir de la zona de confort. El covid ha sido un aliciente para desarrollar tecnologías, de manera tal que se ha visto como habilitadores en un contexto de restricciones a la movilidad.
¿La pandemia ha afectado a vuestros proyectos? ¿Cómo?
Nos ha espoleado a hacer unos proyectos de transformación digital muy estimulantes, a instancias de empresas que van uno o dos pasos por delante.
¿Habéis contado con apoyoe para expandir la firma?
BBVA nos ha dado apoyo desde el minuto 0. Nosotros trabajamos con grandes empresas que nos pagan a 60 días y a veces a 90 días, pero nuestros proveedores no se los puede pagar en el mismo plazo. Si no hubiésemos dispuesto del circulante, hubiera sido más complicado salir adelante.