Las pensiones de Lleida subirán 44 millones más al desviarse el IPC

El Consejo de Ministros aprobó ayer el primer paquete de medidas de reforma de las pensiones para enviarlo al Congreso, con el cálculo de que pueda estar refrendado por las Cortes a lo largo de este año y estar en vigor en 2022. Entre otros aspectos, garantiza la revalorización de las prestaciones en función del Índice de Precios al Consumo. Anula el polémico índice de revalorización de las pensiones que implantó el Gobierno de Mariano Rajoy y que limitaba la subida anual al 0,25% en caso de déficit del sistema. La reforma tiene lugar en un momento en el que la inflación se encuentra en niveles desconocidos desde hace años y muy lejos del 0,9% estimado para este año por el Ejecutivo de Pedro Sánchez.

De hecho, se calcula que la desviación del IPC costará el próximo año del orden de 5.000 millones a las arcas de la Seguridad Social. Para los pensionistas de Lleida debe representar una compensación del orden de los 44 millones. Las 99.881 pensiones contributivas de la demarcación representan prácticamente el 1% de las 9.868.153 que se abonan en el Estado.

Sin embargo, la prestación promedio de la demarcación es un 11,31% inferior. Esta diferencia se debe a varios factores, como el nivel salarial de la demarcación, el peso del sector agrario y del colectivo de autónomos, que en buena parte de los casos cotizan por bases que acaban desembocando en jubilaciones claramente inferiores a los de los asalariados.

La reforma de las pensiones que ahora llega a las Cortes prevé que se mantendrán sin cambios en caso de que el IPC sea negativo. “A partir de hoy ningún pensionista tendrá que preocuparse por su pensión”, dijo ayer la portavoz del Gobierno y ministra de Política Territorial, Isabel Rodríguez. Se deroga también el factor de sostenibilidad que introdujo el PP en 2013 y que aún no se había puesto en marcha, con lo que da además un margen para negociar un nuevo mecanismo de equidad intergeneracional.

La Seguridad Social paga cada mes 99.881 pensiones en Lleida y la prestación media roza los 917 euros

Establece también incentivos para demorar la edad de jubilación, modifica los coeficientes reductores en los casos de jubilación anticipada y limita el acceso a la jubilación forzosa en los convenios colectivos. Al margen de esta primera normativa que entra en las Cortes, el Gobierno y los agentes sociales deben seguir negociando el desarrollo de algunos puntos del acuerdo para los que se dieron un margen. Uno de ellos es el nuevo mecanismo de equidad intergeneracional.

Los sindicatos urgen un acuerdo de los aspectos aún pendientes

Las organizaciones sindicales CCOO y UGT celebraron ayer la aprobación del proyecto de ley con las primeras medidas dirigidas a reformar el sistema publico de pensiones, que esperan continuar con un nuevo acuerdo con el Gobierno y las patronales CEOE y Cepyme.

Entre las materias pendientes por regular, y sobre la cual la propia reforma anticipa su negociación, está la del nuevo mecanismo de equidad intergeneracional, sobre el cual los sindicatos esperan “una definición adecuada y no restrictiva” y “bien distinta de la que tenía el derogado factor de sostenibilidad”. El acuerdo, según los sindicatos, reconoce nuevos derechos en Seguridad Social a jóvenes, parejas de hecho, trabajadores del campo, cuidadoras de personas dependientes; mejora de manera generalizada los coeficientes reductores de quienes se ven obligados o eligen acceder a la jubilación anticipada, favoreciendo, por esa vía de mejora de prestaciones, acercar la edad efectiva de jubilación a la edad ordinaria en cada caso.