Rechazo de empresarios y sindicatos a la reforma de los ERTE de Díaz

CCOO, UGT, CEOE y Cepyme trasladaron ayer al Gobierno su rechazo a la propuesta filtrada sobre el mecanismo que sustituirá a los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) con condiciones especiales, una vez acabada la actual crisis derivada de la pandemia. Propone tres tipos, incluido un mecanismo para afrontar nuevas pandemias. El llamado ‘Mecanismo RED de Flexibilidad y Estabilización del Empleo’ permitirá a las empresas reducir durante un tiempo la jornada o suspender los contratos de sus trabajadores, como en los ERTE.

Una medida que tendrá que activar el Consejo de Ministros ante situaciones de reestructuración sectorial o por causas cíclicas, permitiendo incluso la recolocación de los trabajadores, según el borrador, si bien el ministerio de Asuntos Económicos tendrá que especificar qué indicadores determinarán su puesta en marcha.Según el texto, el mecanismo RED completa las alternativas al despido que funcionarán en el futuro inspiradas en los actuales ERTE. Así, se mantienen también los ERTE por causas económicas, técnicas, organizativas y de producción, así como los de fuerza mayor (para catástrofes) y los de limitación o impedimento, a los que se suman estas nuevas modalidades RED. Todos ellos tendrán exoneraciones en las cotizaciones sociales, que aún no están detalladas, y que estarán vinculadas a la formación de los trabajadores afectados.

La solicitud de este mecanismo permitirá a las empresas reducir la jornada de los empleados afectados, entre un mínimo de un 10% y un máximo de un 70% con duración máxima de 12 meses, recibiendo una “prestación social” especifica que complete su salario. Sin embargo, esta es una propuesta que fue rechazada ayer en pleno por los agentes sociales. Desde UGT echan en falta un “compromiso claro” de mantenimiento del empleo para las empresas que recurran a los nuevos ERTE y se opone “a cualquier intento de introducir, aunque sea tímidamente, la mochila austriaca”, porque entiende que abarata el despido”.

CCOO, por su parte, considera que la propuesta “dificulta sobremanera el desarrollo de las negociaciones”, ya que “no ha estado encima de la mesa” y llega después de casi ocho meses de negociación. Mientras, desde la CEOE, aseguran que la propuesta es “más restrictiva, más intervencionista” y más cara para las empresas que el modelo vigente actualmente.