Caixa d'Enginyers, con 3.000 socios en Lleida, apuesta por atender con proximidad y calidad

¿Qué presencia y que volumen de negocio tiene la Caixa d’Enginyers en la provincia de Lleida? La cooperativa de crédito cuenta ahora mismo con alrededor de 3.000 clientes o socios. De estos aproximadamente un 90% son personas y el resto empresas y alguna administración pública. La oficina de Lleida tiene un volumen de negocio de unos 65 millones de euros. Alrededor de 20 millones son en créditos y el resto en gestión de fondos, cuentas corrientes, depósitos y otras operaciones. En total representa un 2% del total del que tenemos en toda Catalunya.

¿Las previsiones de cara a este año son positivas? Sí, la de Lleida es una de las oficinas que ha tenido un impulso más fuerte y la previsión está en que el crecimiento se sitúe en torno al 10 por ciento y creo que en empresas será aún mayor.

Han querido apostar en Lleida por la presencia física con una remodelación de su sucursal, ¿por qué? Actualmente, estamos trabajando para tratar de ganar espacio no solo en el ámbito de las personas, sino también en el empresarial. Es por eso que queremos apostar por reforzar la proximidad con un espacio físico y teniendo a un equipo que conozca el territorio y sepa ofrecer una asesoramiento de calidad. La idea es que la oficina actúe como un pequeño “hub” y un punto de encuentro. Pese a esto también seguimos reforzando la estrategia digital, porque, por ejemplo en Lleida, nuestros socios tienen que hacer de media 36 kilómetros para acudir a la oficina.

¿Cómo se plantean llegar a todos los socios cuando están tan descentralizados? La verdad es que como contamos con pocos cajeros hemos optado por buscar nuevos acuerdos y fórmulas para ganar proximidad con las personas, sobre todo en Lleida porque es un espacio muy amplio. El último fue con el grupo Bonpreu con el que firmamos un convenio para usar sus tiendas a modo de sucursal bancaria, es decir, si vas a uno de sus supermercados con una tarjeta de la Caixa d’Enginyers puedes retirar dinero en la línea de cajas como si fuera un cajero.

¿La llegada de la pandemia les ha ayudado a acelerar o mejorar vuestro modelo digital? Por supuesto, este periodo nos ha obligado a dar un fuerte impulso a la interacción digital con nuestros clientes. La mejora que hemos hecho en este aspecto ha sido muy grande y satisfactoria.

¿Cuáles son los retos de futuro? Estamos en un momento de gran incertidumbre, pero hay elementos que serán claves, como una buena implantación de los fondos Next Generation, que deben servir para transformar el modelo productivo, y una buena inversión en cambiar el modelo energético.