ESNOTICIA
Las empresas de Lleida se juegan más de 34 millones en ventas a Rusia y Ucrania
Las empresas de la provincia de Lleida se juegan más de 34 millones en exportaciones a Rusia y Ucrania, en un momento en el que la tensión aumenta cada minuto que pasa desde el reconocimiento del Kremlin de las regiones rebeldes prorrusas y Occidente planifica y anuncia las primeras represalias contra el régimen de Vladímir Putin.
La geopolítica ya costó millones de euros a la economía de Lleida, con un especial y duro castigo para el sector frutícola, en 2014, cuando Moscú vetó la entrada en su mercado de una lista de productos agroalimentarios europeos. Era su respuesta a las sanciones que la Unión Europea, Estados Unidos y otros países aplicaron contra Rusia por su papel en el conflicto ucraniano, concretamente con la adhesión de Crimea. Ahora la situación se podría reproducir, después de que Vladímir Putin haya reconocido la independencia de las provincias ucranianas de Donetsk y Lugansk y Occidente ultime una dura respuesta económica.
Lleida se juega más de 34 millones de euros en exportaciones, con casi 29 en el caso de los mercados bajo jurisdicción del Kremlin y poco más de cinco en el caso de los de Kiev. A tenor del balance exportador del año pasado y los datos recogidos por la secretaría de Estado de Comercio, el gran damnificado en estos momentos podría ser el sector oléícola. El año pasado envió productos por valor de más de 8,8 millones a Rusia, otros 2,2 millones correspondieron a conservas y zumos de frutas y verduras y 2,3 millones al capítulo de residuos de la industria alimentaria.
Lleida apenas importa de forma directa de firmas rusas y el año pasado rozaron los 184.000 euros, fundamentalmente en pasta de madera y papel reciclado y abonos.El comercio entre Lleida y Ucrania es mucho más limitado y representó el año pasado cerca de 5,2 millones de euros para las empresas de la provincia, con el capítulo de carnes y despojos a la cabeza (1,48 millones). En el caso de Ucrania, también conocido por muchos como “el granero de Europa”, el problema de un colapso de su comercio podría afectar a la estabilidad del mercado internacional de cereales
Guissona, con la comunidad de Ucrania
Todas las comunidades mayoritarias, centros educativos, comercios, entidades, empresarios y consistorio de Guissona dedicaron el sábado, en el transcurso del Dia de la Lengua Materna, un manifiesto de apoyo a la comunidad ucraniana. Con el lema Manifest per la Pau d’Ucraïna, cada colectivo hizo la lectura de una parte del texto para concluir que: “Rechazamos las amenazas y agresiones militares a estados soberanos.
El conflicto solo se puede resolver a través del diálogo, la paz es el único camino”. El alcalde, Jaume Ars, también dio ayer en nombre de Guissona todo su respaldo. El presidente de la comunidad ucraniana Andriy explica que “estamos muy preocupados por la situación de nuestra gente, pero tenemos menos miedo que en 2014”, cuando Rusia se anexionó Crimea, “ya que ahora tenemos un ejército sólido con más de 250.000 efectivos y el apoyo de la comunidad internacional”.
Para Andriy, “nadie puede saber lo que pasará, ya que Putin ha ido siempre por libre, es un misterio. Por ello, la preocupación en todos nosotros está muy presente”. Para Andriy, la entrada de Rusia en las provincias prorrusas de Ucrania “es un engaño, siempre han estado allí desde 2014, sin identificativos y sin decir quiénes son, pero todos sabíamos que eran los rusos”.
Son provincias que limitan con Rusia y la mayoría son proKremlin. “Es una zona donde no hay democracia, Putin, es un autócrata” afirma Andryi. Por su parte, Igor Grodetskyy, músico que dirige la coral ucraniana de Guissona, dice que tiene poco miedo. “Nuestra gente es muy patriota y defenderemos nuestra tierra ante cualquier intento de agresión”. Ambos llevan 21 años en Guissona.La comunidad ucraniana de Guissona cuenta con 1.064 personas, es decir uno de cada 7 vecinos, y es la segunda después de la rumana, que tiene 1.245. Destaca que uno de cada tres ucranianos que viven en la provincia es vecino de Guissona. En la ciudad conviven personas de 47 nacionalidades y el 52% de su población es de origen extranjero.