La industria cárnica prevé subida de precios pero descarta desabastecimiento

La industria cárnica prevé un incremento de los precios de la carne y productos derivados por la escalada de los costes de producción, sobre todo de la energía y la alimentación animal, desde el estallido de la guerra en Ucrania. "Intentaremos que sea el mínimo posible", ha indicado el presidente de la Federación Empresarial de Carnes y Industrias Cárnicas (FECIC), Joan Costa. Asimismo, el sector descarta problemas de desabastecimiento de materias primas como cereales o piensos. En este sentido, valora positivamente la resolución publicada el lunes por el Ministerio de Agricultura con la cual se flexibilizan temporalmente los requisitos para importar maíz de Argentina y el Brasil. Eso permitirá suplir parte de las importaciones de maíz que llegaba al Estado desde Ucrania.

"Con todo lo que está pasando, con el incremento del coste energético y de la alimentación animal, tanto las explotaciones, como la producción y la distribución, tenemos que hacer alguna cosa para sobrevivir", ha señalado Joan Costa. "La situación es mala y este año será muy difícil con todos los costes que hay y tendremos que subir precios pero tendremos que mirar que sea lo menos posible para que el consumidor pueda comprar y pueda comer", ha remarcado el presidente de la Federación Empresarial de Carnes y Industrias Cárnicas.

El director general de la Asociación de Empresas de Gran Consumo (AECOC), Josep Maria Bonmatí, ha resaltado el impacto que está teniendo el conflicto bélico en el sector cárnico, sobre todo por el hecho de que muchos de los cereales con los que se elaboran piensos para la alimentación animal venían de Ucrania. Sin embargo, ha remarcado que "tanto la cadena de fabricación como de distribución es capaz de responder buscando otros mercados de origen de estos productos".

En este sentido, Bonmatí ha valorado positivamente la resolución publicada el lunes por el Ministerio de Agricultura con la cual se flexibilizan temporalmente los requisitos específicos para importar maíz de Argentina y el Brasil, cosa que facilitará la entrada al estado español de materias primas destinadas a la alimentación animal que suplan las importaciones que llegaban desde Ucrania, tal como ha explicado el director general de la Industria Alimentaria del Ministerio de Agricultura, José Miguel Herrero, en la inauguración del 22.º Congreso AECOC de Productos Cárnicos y Elaborados, que se hace este martes y miércoles en Lleida. Bonmatí, sin embargo, ha apuntado al hecho de que "será necesario flexibilizar también cuestiones como el etiquetado de ciertos productos” para garantizar el correcto funcionamiento de la industria alimentaria.

"Con los stocks actuales y con la flexibilización de compra de otros países, no habrá este problema de desabastecimiento ni de la alimentación animal ni de materias primas de otros productos", ha afirmado el director general de AECOC. En el mismo sentido, se ha pronunciado Joan Costa. "Pagando tendremos de todo pero el problema será el precio", ha remarcado el presidente de la FECIC.

Desde de AECOC, Josep Maria Bonmatí, también se ha referido a las imágenes de repisas de supermercados vacías de algunos productos. "Desde el punto de vista de suministro, lo que vemos en las tiendas es que cuando se produce un comportamiento no previsto y no racional por parte del consumidor, puede haber algún producto que en un momento no lo encuentren pero eso se soluciona como se ha demostrado en los dos años que ha durante la pandemia", ha indicado.

El sector cárnico consolida el incremento de ventas alcanzado durante la pandemia

El sector de productos cárnicos consolidó en 2021 buena parte del crecimiento alcanzado durante la pandemia, después de cerrar el año con un incremento de facturación del 6,6% con respecto a los datos de 2019, según los datos presentados por NielsenIQ en el marco del 22.º Congreso AECOC de Productos Cárnicos y Elaborados.

Según la información de la consultora, en 2021 los precios de los productos cárnicos crecieron un 1,8%, un porcentaje inferior al 3,1% con el que se cerró el IPC general del año pasado. El analista de NielsenIQ, Ignacio Biedma, ha destacado que el consumo de carne en los hogares sigue siendo más alto que antes de la pandemia. "La crisis sanitaria cambió la tendencia a la baja en el consumo de productos cárnicos en las casas, por lo cual es probable que en los próximos meses parte de este consumo vuelva a sectores como el de la restauración". En el análisis de tendencias, el informe destaca que la carne fresca acumula el 62,5% de las ventas del sector, con crecimientos importantes en la demanda de pollo y pavo, mientras que cae la compra de productos de charcutería.

La tercera línea de negocio del sector es la de los platos preparados cárnicos, que sigue representando un porcentaje muy bajo del total de las ventas. Aun así, algunos de los servicios, como los de platos preparados calientes en los supermercados, crecieron en 2021 un 66%. "La conveniencia es uno de los principales motivos de compra para los consumidores y todas las soluciones que nos faciliten la vida crecerán en los próximos años", según ha dicho Biedma.

En esta misma línea, los datos de NielsenIQ muestran que el canal 'online' actualmente sólo representa el 1% de las ventas de productos cárnicos, pero su crecimiento durante 2021 ya fue del 9,8%.

Menos carne, pero de más calidad

La consultora de AECOC Shopperview, Marta Munné, ha completado la radiografía del sector con la presentación del informe 'Los indicadores de la carne: entendiendo al consumidor', que apunta al hecho de que el 42% de los españoles consumen menos carne, pero de más calidad. El informe describe a un consumidor de carne más selectivo que hace algunos años. De hecho, el 65% de los encuestados afirma que consume cualquier tipo de carne, pero ya hay un 29% que limita su compra a algunos tipos de carnes y un 6% que se declara flexivegetariana y afirma haber reducido significativamente la presencia de proteína animal en su dieta.

Aún así, la carne sigue siendo un producto apreciado y que los consumidores vinculan con el placer. Según los datos de AECOC Shopperview, el 63% de los encuestados indica que disfruta comiendo carne y más de la mitad no se plantea sustituirla por productos con alternativas proteicas, como hamburguesas de tofu o vegetales.

Entre los motivos para reducir el consumo de carne, el estudio apunta principalmente a la preocupación por la salud y la sostenibilidad, el consumo de otras proteínas como el pescado o la sensibilidad en relación con el sufrimiento animal.