Aragonès pone a Taurus como ejemplo del crecimiento de la industria catalana

Pere Aragonès inauguró ayer el nuevo centro logístico de la empresa leridana Taurus, fundada en Oliana hace 60 años por Francesc Betriu. La fabricante de pequeños electrodomésticos estrenará en las próximas semanas un nuevo espacio de 15.000 metros cuadrados dotado de inteligencia artificial, que permitirá doblar su capacidad de almacenamiento. Se pasará de las 20.000 posiciones de palet actuales a las 30.000, en su primera fase de expansión. Cuando el nuevo espacio trabaje a pleno rendimiento, se llegará a las 45.000.

La compañía invierte cuatro millones de euros para consolidar el centro de Oliana como un hub logístico europeo. Taurus tiene presencia en más de 120 países, y el 70% de su volumen de negocio es en el extranjero. En 1979 empezaron a internacionalizarse, hasta llegar a abrir centros de producción en México, Sudáfrica, la India y China.

Actualmente, en el centro de Oliana trabajan unas 250 personas, que representan la mitad de los más de 500 asalariados de la compañía en Catalunya. El total de la plantilla de Taurus Group asciende hasta los 1.200 trabajadores.Aragonès reconoció Taurus como un ejemplo de los “grandes activos” del territorio, y celebró su apuesta de futuro para continuar reindustrializando Catalunya. Además, recordó el objetivo de la Generalitat de aumentar el peso de la industria en el PIB.

Actualmente es del 19,80%, y tienen por objetivo llegar al 22% en 2025 y al 25% en 2030. El president concluyó que uno de los grandes retos de Catalunya es “convertirse en un actor protagonista para liderar el diseño y producción del chip europeo”, un elemento que definió como “estratégico y determinante para el futuro de nuestra economía”.El presidente honorífico de Taurus Group, Ramon Térmens, abogó por mantener la colaboración con las instituciones y destacó que uno de los puntos clave de la compañía es el arraigo en el territorio. Raúl Ubric, uno de los propietarios de la empresa, reconoció las dificultades de competir contra grandes operadores y pidió tener en cuenta las “singularidades” de la compañía.

La empresa leridana se consolida y explora nuevas líneas de negocio

La inauguración del nuevo centro logístico de Taurus se celebra en el marco de su 60 aniversario. Francesc Betriu, ingeniero y empresario catalán, fundó la empresa junto a Jordi Escalé y dos socios más en 1962. En 1964 empezó la fabricación en cadena con una línea de montaje de seis operarios, y el año siguiente comenzó la producción industrial. Unos años más tarde, en 1977, se volvieron totalmente autosuficientes. Dos años después llegó el salto internacional a México y Venezuela. En 1982 ya exportaban a 48 países.

Algunos de los productos más populares en la época eran la Bapitaurus -su batidora picadora- y Tropicano -el popular termoventilador-. En 1997 los empresarios Ramon Térmens y Jorge Tornini adquirieron Taurus, sumida en una grave crisis. Pocos años después se consolidó el grupo empresarial y empezó la etapa de internacionalización, en la que se expandieron por todo el mundo en poco tiempo.

Crearon Mycook en 2005, una marca exclusiva para robots de cocina. Dos años después lanzaron su primer robot y se volvió su producto estrella. Progresivamente, fueron absorbiendo marcas como Casals, Winsor y Alpatec, que ayudaron a la compañía a diversificar sus productos y abrir nuevas líneas de negocio.

A principios de 2020, el grupo adquirió la marca francesa Supra, que según el director general, Enric Tria, “serviría para posicionarse en el sector de la biomasa con una extensa gama de chimeneas y sistemas de calefacción”. Taurus Group cerró el ejercicio 2020 con 219 millones de euros de facturación, un 6,78% más que en 2019, y con un beneficio operativo de 19,2 millones, por encima de los 18,2 del 2019. La previsión de crecimiento de la empresa se centra en parte en el sector de energías renovables, con la instalación de estaciones fotovoltaicas, tanto para hogares como empresas.