BODEGAS CAMPAÑA
El calor y la sequía avanzan unos quince días la vendimia en L'Olivera
La más temprana que vive la cooperativa en Vallbona de Les Monges || La producción caerá entre un 10 y un 15% pero la uva es de calidad y sin problemas sanitarios
L’Olivera ha iniciado este martes la vendimia con más de 15 días de adelanto frente a las fechas habituales, lo que convierte esta en la más temprana desde que comenzó a elaborar vino, en 1989. Este adelanto en Vallbona de les Monges se debe, básicamente, a las escasas precipitaciones, que se suman a la sequía del año pasado, y a las altas temperaturas de primavera y verano, que han llevado a situaciones de sequía en los viñedos, en general en toda Catalunya. Esto ha hecho aumentar de forma drástica el estrés hídrico de las plantas, que ya venían arrastrando desde el invierno y, en consecuencia, ha afectado en su desarrollo, dando como resultado una uva más pequeña y una maduración muy avanzada debido, también, a la poca oscilación térmica entre día y noche en la temporada de primavera-verano en la subzona de los Valles del Río Corb, explica L’Olivera.
La cosecha descenderá entre un 10 y un 15%. Como contrapartida, la escasa humedad ha hecho que el viñedo no se haya visto afectado por enfermedades fúngicas y, por tanto, se espera mucha sanidad y una uva de mucha calidad. Con todo, habrá que ver cómo evoluciona la meteorología de estos días, que marcarán la evolución de la maduración de la uva y determinarán el volumen final de la vendimia 2022.
En el viñedo de la masía Can Calopa, en el Parque Natural de Collserola, en Barcelona, ??la situación es bastante similar. Aunque en primavera se esperaba una buena cosecha -gracias, en parte, por algunos episodios de lluvia durante el invierno-, un verano muy seco ha hecho variar las previsiones: las uvas se han quedado pequeñas y las maduraciones no son uniformes, explica la cooperativa. En Can Calopa la vendimia también se adelantará entre 10 y 15 días en algunas variedades como la Garnacha y el Merlot.A todo esto se le suma la presión de la fauna, sobre todo del jabalí, que desde hace años obliga ya a tomar medidas como la colocación de redes en los viñedos.
Medidas, sin embargo, que este año no han sido suficientes, ya que la avanzada maduración de la uva también ha propiciado la presencia de jabalíes, tanto en Can Calopa como en el viñedo que L’Olivera gestiona en el Parc Agrari de Sabadell.