Acceso a la banca obligatorio en 107 municipios leridanos

Los bancos tendrán que garantizar el acceso presencial a sus servicios en un total de 107 de los 231 municipios de la provincia de Lleida. Se trata de aquellos que cuentan con una población de más de 500 habitantes. Así lo acordó ayer el Gobierno central con las patronales bancarias, que fijaron un término máximo de seis meses para tener instalado al menos un punto de acceso presencial –oficinas bancarias, cajeros autonómicos, agentes financieros u oficinas móviles– en aquellos municipios que no cuentan con ninguno de ellos.El acuerdo también establece que en los municipios de menos de 500 habitantes deberán facilitarse “soluciones alternativas” que permitan a sus habitantes el acceso a la banca.

Algunas de las medidas por las que podrían optar son contar con los servicios de los carteros rurales o por las fórmulas de cash back o cash-in-shop, es decir, una alianza entre los bancos y establecimientos físicos que permitan la retirada o el ingreso de dinero en efectivos en tiendas, gasolineras, supermercados, ayuntamientos o puntos de venta de loterías, entre otros. Todo ello se complementará con el desarrollo de acciones formativas dirigidas a facilitar el uso del nuevo servicio y el acceso a la banca electrónica y la atención telefónica, que correrán a cargo de las entidades financieras. El texto firmado también detalla que las entidades que se planteen cerrar el único punto de acceso a efecto en estos municipios en riesgo de exclusión financiera deberán comunicarlo a sus clientes, como mínimo, cuatro meses antes.

En total 132 de los 231 municipios de la provincia carecen actualmente de oficinas bancarias, lo que significa que unos 40.000 leridanos deben desplazarse a otra localidad para poder hacer trámites u obtener dinero en metálico.El acuerdo fue rubricado por el Ejecutivo de Pedro Sánchez con la Asociación Española de la Banca (AEB), la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA) y la Unión Española de Cooperativas de Crédito (Unaccc).