La inflación en Lleida se mantiene en el 10% en septiembre pese a moderarse los precios

El Índice de Precios del Consumo (IPC) interanual en la provincia de Lleida descendió el mes de septiembre 2,2 puntos en Lleida en comparación con el registrado en agosto, aunque la cifra se mantiene por encima de los dos dígitos con 10 puntos, según informó ayer el Instituto Nacional de Estadística (INE). Además, Lleida es la provincia más inflacionista de Catalunya. Pese a que se han registrado descensos en todos los ámbitos, el mayor descenso ha sido en el de la vivienda, el agua, la electricidad, el gas y otros combustibles, donde se ha pasado de los 31,3 puntos de agosto a 20,4 en septiembre.

Le siguen el del traje y el calzado, con un descenso de 2,8 puntos, hasta los 7 puntos; bebidas alcohólicas y tabaco, con 1,7 puntos (2,7); el transporte, con 1,4 puntos (9,6); y el ocio y cultura, con 1,2 puntos menos (2). Los alimentos y las bebidas no alcohólicas bajaron medio punto, hasta los 13,7 puntos.En el conjunto de Catalunya, el IPC se moderó hasta el 8,5% interanual en septiembre. Se trata de 1,7 puntos menos que el indicador de agosto y encadena dos meses consecutivos de descensos.

En cuanto a la variación mensual, en Catalunya los precios han bajado ocho décimas. A pesar de la tendencia bajista del indicador general, el precio de los alimentos ha continuado al alza. En concreto, en Catalunya la comida y las bebidas no alcohólicas se encarecieron un 12,9% respecto al año pasado, una tasa ocho décimas superior a la de agosto.

De hecho, esta subida es la más alta de la serie histórica, es decir, desde 2002.Por el contrario, los precios de la vivienda, el agua, la electricidad, el gas y los combustibles se han moderado en comparación con agosto. Así, mientras que en el pasado mes registraron una subida interanual del 22,6%, en septiembre la tasa se situó en el 13,9%. En cuanto a la variación mensual, el INE indica que los precios han descendido un 4,4%.Por su parte, IPC estatal también se moderó en septiembre al 8,9% interanual, una décima menos de lo adelantado por el INE y 1,6 puntos menos respecto a la inflación registrada en agosto.

Se debe, principalmente, a la bajada de los precios de la electricidad y de los carburantes. De hecho, el grupo de vivienda moderó más de 10,5 puntos su tasa interanual, hasta el 14,2%. No obstante, los alimentos y bebidas no alcohólicas también subieron, esta vez un 14,4% interanual, una tasa seis décimas superior a la del mes anterior y la más alta desde el comienzo de la serie estadística en enero de 1994

La caída más abultada de precios en Lleida ha recaído en la vivienda pasando del 31,3 al 20,4% en un mes

El FMI confía en que la economía española no entrará en recesión en 2023 como prevé Alemania

El Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo (BCE) seguirá elevando los tipos de interés en sus próximas reuniones ante la perspectiva de que la inflación se mantenga por encima del objetivo durante un período prolongado y a pesar de la significativa ralentización de la actividad esperada e la zona euro durante los próximos meses y en 2023, según afirmó ayer Christine Lagarde, presidenta del BCE, en la reunión del Comité Monetario y Financiero Internacional.

Asimismo, Lagarde reconoció que la perspectiva de crecimiento para la zona euro se ha oscurecido debido a la alta inflación, la disminución de los efectos de la reapertura, el debilitamiento de la demanda mundial y la caída de la confianza. “Es probable que estos factores provoquen una ralentización significativa del crecimiento del PIB de la zona del euro en la segunda mitad del año y principios de 2023”, advirtió, indicando que, además, los riesgos para el crecimiento son principalmente a la baja, particularmente por la guerra en Ucrania.Ante la normalización de la política monetaria del BCE, la francesa instó a que el foco de la política fiscal cambie progresivamente hacia medidas que preserven la sostenibilidad de la deuda sin poner en peligro la recuperación en el medio plazo.Por otro lado, el Fondo Monetario Internacional (FMI) estimó que España no entrará en recesión en 2023, como Alemania, y seguirá creciendo por encima de la zona euro durante el año que viene, aunque hasta comienzos de 2024 no se habrá recuperado hasta su nivel previo a la pandemia. El martes, el FMI apuntó que aunque España crecerá más de lo estimado este año gracias a la recuperación del turismo y a la producción industrial (el 4,3%), el año que viene se frenará más de lo esperado.

Economía destaca que el IPC refleja el impacto positivo de sus medidas

El ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital destacó ayer que la moderación de la inflación en septiembre pone de manifiesto el impacto positivo de las medidas puestas en marcha para amortiguar el alza de los precios. Asimismo, destacaron que la inflación subyacente se ha reducido dos décimas, hasta el 6,2 por ciento.Por su parte, según la OCU, las familias afrontarán un sobrecoste anual de más de 830 euros en alimentación como consecuencia del alza de la inflación y solicitó al Gobierno una suspensión temporal de impuestos ligados a la energía, así como aumentar las ayudas a los hogares.

Los sindicatos valoran la moderación de los precios

UGT recordó ayer que la inflación “continúa siendo el principal problema de la economía española”, a pesar de su moderación en el mes septiembre.Por su parte, la secretaria de Acción Sindical y Empleo de CCOO, Mari Cruz Vicente, responsabilizó de la inflación a las empresas de llevar a los precios de los alimentos a una subida récord al trasladar el coste de la electricidad y de las gasolinas al precio final de sus productos.Mientras, Pimec pidió que se mantenga la aprobación de medidas para preservar la viabilidad empresarial ante la situación de “tensión inflacionaria” que, aseguró, sufren las empresas.