BALANCE SEGURIDAD SOCIAL
Los leridanos cierran el año con las pensiones más bajas de Catalunya
Se sitúan en los 977 euros, 161 por debajo de la media catalana y 117 de la estatal || Superará los mil euros el próximo mes con la revalorización del 8,5%
Los pensionistas de la provincia de Lleida han cobrado este último mes del año 977,42 euros de media, la cifra más baja de toda Catalunya y que se sitúa 161 euros por debajo de la media del territorio. Si la comparamos con el mapa estatal solo hay catorce provincias españolas donde los pensionistas perciben aún menos. La media estatal es de 1.094,87 euros, lo que supone 117,45 por encima de la “nómina” en las comarcasleridanas.
En el caso de la pensión de jubilación, los leridanos cierran el año situados en el furgón de cola. El ingreso medio se ha situado este diciembre en los 1.116,09 euros, cerca de 170 euros por debajo de la pensión media catalana y 143 euros menos que la estatal. Por su parte, la pensión por viudedad en la provincia es de 680,20 euros; la de incapacidad se sitúa en los 1.010,48; la de orfandad en los 396,67 euros y el ingreso en favor de familiares en los 634,80.
Las más de 100.000 pensiones contributivas que hay en la provincia se verán revalorizadas con la entrada del nuevo año un 8,5%, lo que elevará la pensión media por encima de los 1.000 euros mensuales. El Consejo de Ministros aprobó ayer el real decreto que recoge esta subida, establecida en los presupuestos generales del Estado para el nuevo año y en virtud de la fórmula de revalorización acordada en la primera pata de la reforma de las pensiones para no perder poder adquisitivo. El incremento del 8,5 por ciento que experimentarán es el resultado de la media del IPC entre diciembre de 2021 y noviembre de 2022.Aplicar esta subida, que a nivel estatal tendrá un coste de 13.600 millones para las arcas públicas, supondrá elevar las pensiones de los leridanos en 83,08 euros.
De esta manera, alcanzaría la media de 1.060,5.El año, no obstante, se iniciará con las negociaciones sobre la segunda fase de la reforma del sistema de pensiones pendiente. El ministerio de Inclusión propuso a los agentes sociales ampliar progresivamente el periodo de cómputo a 30 años, pero descartando los dos peores años cotizados. Significaría que la pensión se calcularía con los mejores 28 de cotización dentro de un periodo total de 30 años, pero fue rechazado por sindicatos y patronal.
El retraso de estos cambios, que deberían haber llegado antes de acabar el año, en virtud de los compromisos alcanzados con la UE para recibir fondos europeos, no frenarán la llegada de las ayudas, según aseguró ayer el presidente Pedro Sánchez.